… Y esto debe ser reflejo de una sociedad recargada. Pero, la sociedad tiene más claro contra quien quejarse y los políticos, más allá del dialogo, del que siempre hablan pero no concretan en la política en serio, buscan al opositor para su descarga mediática. Saltan para esto al común de la gente que mira desesperada. En síntesis, la misma queda en el medio de las piedras y las balas, o la “balacera”, como se usa ahora, término que no casualmente proviene de México y entonces, en esto también nos copiamos, como copiamos al narcotráfico creciente y sus sangrientas luchas territoriales.
Uno, en tanto, observa y ruega que no le toque alguna de las balas reales que dispara la delincuencia, mientras ve la puesta en escena de broncas y distancias, que no aproximan ninguna solución. Escena que transcurre por arriba, por los cargos que ocupan, pero por debajo de las expectativas de la comunidad. Pero cuidado, no sería extraño escuchar luego las carcajadas de los protagonistas al salir por la misma puerta y hasta quizás ver los abrazos. No sería raro entre tanta hipocresía. De unos y otros.
A propósito de las puestas en escena. El otro día, no muy lejano, por los hechos de inseguridad con la muerte de un taxista, veíamos al intendente Gustavo Pulti, profundamente indignado. Ahora ¿con quién estaba enojado?
Una crónica decía: “Desencajado. El intendente Gustavo Pulti mostró bronca y desesperación al hablar del crimen del taxista… Usó palabras que no suele pronunciar en público: exigió que “los chorros” estén “tras las rejas”; reclamó “compromiso social” y “sentido común” a la Justicia y hasta pidió “a Dios” por el cese de estos crímenes”.
Curiosamente, el término “desencajado”, se repetía en varias notas anteriores de diversos medios, incluido MDPHOY, sobre diversas situaciones vividas en la ciudad. Y aquí nuevamente vamos, es nuestra costumbre, al análisis de la palabra como punto de partida. Desencajado: Con el rostro alterado por el terror o el sufrimiento. Desencajar: Sacar algo de su sitio, desunir el encaje que tenía con otra.
No queremos decir que el intendente Pulti no reflejó el sufrimiento acorde a estas circunstancias y que no sean reales, pero uno debe exigir que se sepa hacia quien va dirigido el enojo. Aunque lo mejor sería escuchar “me hago cargo de lo que me toca”. Que es mucho como jefe político del partido de General Pueyrredón
Creo que la sociedad necesita políticos encajados en su tarea preventiva. Se dice que se hizo esto, aquello, lo otro. Temporada “espectacular” (si se la puede denominar así en algún aspecto), de acuerdo a las declaraciones, en cuanto a seguridad. Quedó claro que fue así en algunos sectores privilegiados que tenían el infaltable cartel de “Gobernación Daniel Scioli”, que es más o menos lo mismo que “Scioli lo hizo”. Pero, Pulti también, contemplando que la ciudad no es sólo ciertos lugares, es un todo donde viven personas y quieren tranquilidad como eje central de su bienestar.
Finalizando con un dato. La comuna tiene cada vez más funcionarios dedicados a la seguridad. Consecuencia a la vista, en esta triste realidad de andar primeros por la provincia en estadísticas, superando holgadamente aquello de que es “una sensación térmica”, cada vez más inseguridad en la “amada” Mar del Plata.
MIGUEL TOSCANO
Excelente.Pulti no encaja en un modelo serio y racional de administrar y liderar en estos tiempos.Es hipocrita,necio,fanatico de si mismo,ignorante y sobre todo una persona a la que solo le preocupa obedecer a los poderosos de siempre .
Gracias Mariano por comentar.