Verónica Borelli, madre de Lucía Bernaola, la menor de 14 años que murió tras ser embestida a gran velocidad y en estado de ebriedad por el joven Federico Sasso, en Alberti y Boulveard Peralta Ramos, con el patrocinio de letrado Maximiliano Orsini, elevó un proyecto al intendente Carlos Arroyo en el cual solicitó la construcción de un paredón de hormigón que separe ambas manos de circulación a efectos de evitar el sobrepaso de vehículos a la mano contraría que pudiesen ascender a la acera que allí se ubica.
Borelli destacó que “la colocación de conos plásticos o separadores amarillos que se ubican en la intersección de Alberti y la avenida mencionada, evidentemente no son suficientes para evitar que los vehículos que circulan a gran velocidad pasen a la mano contraria o asciendan a la vereda de circulación peatonal, circunstancia que se corrobora por el trágico accidente en el que perdió la vida mi hija Lucía”.
Asimismo, en la presentación aclaró que “la excesiva velocidad con que los rodados circulan por la Av. Patricio Peralta Ramos en su intersección con calle Alberti sumado en ocasiones a la ingesta de alcohol de los conductores, provoca el traspaso de la doble línea amarilla divisoria de manos de circulación de dicha avenida y el ascenso de los rodados a la vereda que allí se ubica” y añadió que “incluso generando un mayor peligro en temporada estival cuando el caudal de turistas en la ciudad de Mar del Plata se acrecienta significativamente”.