Elisa Carrió lo considera incurso en encubrimiento de conductas criminosas, sesionando a puertas cerradas y lejos de la transparencia que amerita un acto de estas características y no permitir el derecho a defensa.
La diputada nacional Elisa Carrió hará una ampliación de la denuncia por encubrimiento agravado y abuso de autoridad contra la procuradora Alejandra Gils Carbóluego de que cuatro miembros del Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público suspendieran anoche al fiscal José María Campagnoli, acusado por su jefa de mal desempeño en el caso contra Lázaro Báez.
Según Carrió, Ernesto Kreplak, Daniel Adler, Rodolfo María Ojea Quintana y María Cristina Martínez Córdoba buscan “encubrir las conductas criminosas de los imputados en la causa Báez que, se sospecha, vinculan a los imputados con las más altas esferas del Poder Ejecutivo Nacional”.
La diputada nacional apuntó contra la “oscura circunstancia” de haber sesionado a puertas cerradas, “lejos de la transparencia que amerita un acto jurisdiccional de estas características”. Además, destacó el hecho de que el Tribunal de Enjuiciamiento haya rechazado “la presencia de algunos diputados y la presentación de un amicus curiae con el solo fundamento de que no estaba prevista esa intervención en el proceso de remoción”.
“El proceder de los miembros del Tribunal de Enjuiciamiento violó flagrantemente las más básicas garantías constitucionales del artículo 18 de la Constitución al no permitirle al fiscal Campagnoli ejercer el más básico derecho de defensa frente a ese cuerpo”, agregó.
Carrió hizo hincapié en la “animosidad” del tribunal “que no busca justicia sino castigar a un fiscal para amedrentarlo por haber investigado personajes cercanos al poder”.