Mientras se renovaban las autoridades del Deliberativo y juraban los nuevos concejales, el clima de emoción y alegría se mezcló con momentos de tensión, por lo que sucedía en la puerta del Municipio, donde algunos cooperativistas reclamaban y cortaban, y de paso “piropeaban” a las jóvenes que pasaban por el lugar.
En primera fila se encontraban el intendente Pulti, el obispo Juan Alberto Puiggari, el ex intendente Angel Roig, con un aspecto jovial a pesar de sus ochenta años; la diputada provincial Julia García y el secretario de Gobierno Ariel Ciano.
Mientras que la segunda la ocupaban las autoridades de las Fuerzas Armadas y el titular del EMTUR Pablo Fernández, quien en ocasiones dialogaba y bromeaba con el concejal Nicolás Maiorano.
La sesión fue presidida por el veterano dirigente Ricardo Palacios y la secretaría la ocupaba la concejala electa Débora Marrero, quien luego pidió licencia para desempeñar cargos en el Departamento Ejecutivo, situación que provocó cierto revuelo entre los ediles. Evidentemente enojada, Vilma Baragiola le solicitó a Palacios, que le dejara la titularidad del cuerpo a Carlos Aiello, quien se convertía en el edil de mayor edad ante el pedido de licencia de la polifuncionaria del Intendente. Y a Palacios no le quedó otra que aceptar. Además y sin Marrero, el pequeño Santiaguito (como le dijo Pulti en su discurso) ocupó, por ser el “bebé” del legislativo, la secretaría del cuerpo.
Cierto clima de tensión inundó la sesión preparatoria, cuando el bloque de concejales de la UCR, pidió la impugnación y la anulación de todos los votos que emitiera el candidato espejo Eduardo Pezzati, quien además está a cargo del Consorcio Portuario.
El concejal, por cierto, se exhibió ofendido por la actitud de sus colegas, no emitió palabra en toda la asamblea. Estaba tan molesto que optó por el silencio y no brindó declaraciones, sólo dijo días pasados que no cobrará su sueldo como concejal. “Está re caliente”, “Lo vamos a hacer goma……”, se escuchó desde un sector de la oposición.
Es más, el hombre de Scioli le habría dicho a Baragiola: “Esta no te la perdono”. A la legisladora radical no le importó demasiado: luego su bloque organizó una conferencia de prensa para asegurar que el pedido de impugnación llegará a los estrados judiciales.
Era muy evidente la fractura, entre algunos representantes de Acción Marplatense, que ni siquiera cruzaban palabras. Uno de los más aplaudidos durante toda la sesión fue Diego Monti, quien asumía su banca tras su paso por la Secretaría del HCD.
Al que se lo observó muy asesorado fue al edil Carlos Arroyo, quien, tras haberse divorciado de Mario Luchessi, recibía a cada instante la ayuda de su hijo, que le iba explicando el desarrollo de la asamblea. Luchessi, por su parte, cuando fue a abrir su despacho, parecía más contento que un niño con un juguete nuevo, ya que sólo decía: “Qué lindo es”.
Fraternal fue el abrazo entre Pulti y Artime, cuando el jefe comunal ocupó el estrado para bridar su discurso y no sólo eso, sino también Pulti en su disertación le dijo “hermano”, descartando los rumores y comentarios que hablan de diferencias (no públicas) entre ellos. Lo elevó en su discurso por el trabajo de estos últimos dos años, calificándolo de impecable, lo cual convierte al arquitecto en candidato excluyente de Acción Marplatense, para el próximo turno de elección de intendente, siempre y cuando el propio Pulti desista de la posibilidad de ser reelegido
Pero Pulti, no sólo se abrazó muy cordialmente con Artime, sino que también lo hizo con la nueva secretaria del HCD, la bella María Eugenia Dicándilo, quien recibió salutaciones de todos los sectores políticos, que destacaron asimismo la elegancia del modelo que vestía y la volvía más agraciada.
Quien bailó al compás de la música, e hizo notar sus dotes danzantes, moviendo sus caderas fue la diputada provincial cobista Julia García, quien poseía un look al mejor estilo “Floguer” (pelos pelirrojos parados que combinaban con su trajecito color negro veteado), uno de los asistentes deslizó por lo bajo que llegó la “tinellización” a la política marplatense, al observar a la legisladora quien recientemente fue reconocida por su labor legislativa.
Por Gerardo Fernández