Con bombos, redoblantes y bombas de estruendos, esta noche ingresaron a las instalaciones del establecimiento, como derivación del conflicto en el cual 32 trabajadores de la empresa de transportes El Trébol, propiedad de Alicia Ibañez, no cobraron sus haberes y se consideraron despedidos, reclamando sus respectivas indemnizaciones.
El conflicto lleva aproximadamente 30 días de duración, sin que las partes hayan llegado a un acuerdo, aún con la intervención de la Secretaría de Trabajo de la Provincia. Los trabajadores montaron en el lugar Rivadavia, entre Corrientes y Entre Ríos, una olla popular y se mantienen en las carpas allí instaladas a la espera de soluciones.
Cómo se sabe el gremio que conduce la familia Moyano, por estas días han tomado plantas de Techint y otras constructoras. También han hecho lo propio con la distribuidora de diarios de Clarín, Carrefour, Coca Cola, servicios de clearing bancario, levantando además cabinas de peaje, sin embargo este conflicto local continúa sin poder resolverse.