El 21 de enero de 2014 Marcelo Artime, titular del ENOSUR, señalaba que “se registraron 138 ml. de lluvia desde las 23 de ayer lunes hasta las 5 de la madrugada de hoy martes. Defensa Civil estuvo trabajando toda la noche”.
Siempre se puede estar peor progresivamente y ese es el rumbo que lamentablemente se puede apreciar, observando la magnitud de los daños causados por los 76 mm de lluvia caídos en menos de 20 horas, según informó el diario La Capital, entre el último domingo y ayer lunes.
Algo pasó, o el pluviómetro andaba mal. Las fotos y comentarios que surgen de las redes sociales, indican que los daños causados son mucho mayores que los acontecidos en el 2014 cuando recibió en 6 horas 138 milímetros, como informaba el arquitecto Artime en ese momento.
Los desagües de la ciudad están calculados para un escurrimiento de 30 milímetros por hora, pero no dieron abasto para una lluvia que promedió 3,8 mm por hora, sin dejar de tener en cuenta que hubo picos de la precipitación con algunos intervalos en las primeras horas de iniciado el meteoro en la tarde / noche del domingo.
Luego la lluvia se descargó con menor intensidad pero con continuidad, hasta amainar definitivamente en la mañana de ayer. Si este tipo de fenómenos se repitieran como está previsto, las situaciones se pueden agravar debido a que las fallas estructurales que existen se agravan por los malos servicios que se prestan.
Quedó demostrado, que ya el sistema no aguanta ni la mitad de las precipitaciones en el cuádruple del tiempo de los registros, en relación a 2014.
El intendente Montenegro difundió ayer fotos con el esqueleto de un camélido gigante, cuando la ciudad se reponía en parte de la copiosa lluvia que comenzó a caer el lunes. Es una curiosidad más en su intensidad y calidad de gestión, que se está generalizando como deficitaria e inoperante.
Los vecinos reclaman por el mal servicio de recolección de residuos, por la falta de poda en el arbolado urbano y en especial la limpieza de las bocas de desagües obturadas por las hojas de los árboles sin podar, bolsas de plásticos y basura en general. Posiblemente estén obturados porque la mugre reduce el diámetro de las cañerías.
La paleontología y los camélidos gigantes son sin dudas episodios atrapantes en la vida de la ciudad.
Pero el equipo de Montenegro no está en condiciones de distraerse de sus funciones específicas y esenciales para las cuales fueron designados. Teléfono para Sebastián D `Andrea, sólo sostenido por el PRO en el EMSUR, y para algún funcionario y operador ad honorem que esté al gas en el Departamento Ejecutivo, porque la gente la está pasando muy mal.
No sólo es “ah pero el kirchnerismo”, se agotaron los tiempos y hubo una señal en La Pampa hace 48 horas. Incipiente pero señal al fin.
Recientemente Horacio Rodríguez Larreta degustando una medialuna en Sao de Peatonal San Marín afirmó ante un reclamo puntual de un vecino: “Guillermo (por Montenegro) hace 12 años que está con nosotros y en 4 años no puede resolver todo”. De acuerdo con HRL, lo que no puede hacer es empeorarlo todo
Y parafraseando a Sergio Berni: “El que trajo al borracho que se lo lleve”