Dos horas y 25 minutos de tremenda acción no le alcanzaron esta vez a Buenos Aires Unidos, que en el ámbito del tie-break (ese que ha visitado más veces que ningún otro equipo en la temporada) perdió ante Boca-Río Uruguay Seguros, este jueves en el estadio de Once Unidos.
El “xeneize” se impuso por 3 a 2, con parciales de 20-25, 33-31, 26-24, 18-25 y 17-15. La definición del segundo segmento, en el cual BAU dispuso de cuatro set balls y consiguió torcerle el brazo a su rival, y la enorme producción de Marcos Domínguez (35 puntos), resultaron las claves principales de la noche. Ahora, la serie se trasladará, el martes y jueves próximos, a Concepción del Uruguay –donde Boca juega como local-, con el empate parcial 1 a 1. BAU no sólo perdió el partido, sino también la ventaja de cancha, lo que equivale a decir que tendrá que ganar al menos uno de los juegos en la localidad entrerriana para mantenerse con vida en los cuartos de final de la Liga Argentina de Vóleibol Tarjeta Nativa Nación. En el equipo “naranja y negro” anotó 27 puntos Marcos Milinkovic.
El local empezó el juego muy enfocado, con la determinación de querer imponer condiciones desde el comienzo. Obligó a partir del saque, su bloqueo se hizo fuerte y, a la hora de atacar, Juan Ignacio Finoli buscó mucho a los centrales, que anotaron los 4 primeros puntos de BAU al llegar al primer tiempo técnico (8-5).
El cubano Ihosvany Hernández, de gran primer capítulo, fue el estandarte de una ventaja que si situó en el orden de los 3-4 puntos hasta el 14-10. Entonces, sobrevino una ráfaga de errores de local que Boca, con el siempre rendidor Marcos Domínguez supo capitalizar y el juego entró en un plano de igualdad (17-17). Tuvo que aparecer Milinkovic y una muy buena serie de saques ganadores (el propio capitán, Hernández y Mariano Giustiniano) para encaminar la victoria parcial.
En medio de un interesante duelo de hinchadas, el segundo set tuvo un desarrollo épico. Porque con el impulso del primer set, BAU arrancó con todo, incluyendo algunas jugadas espectaculares a partir de grandes defensas para situarse 5-1 frente a un adversario obnubilado.
Pero repentinamente, el desarrolló cambió drásticamente. Boca, de la mano del rol protagónico de Domínguez selló 4 puntos seguidos y pasó a ganar (6-7). A partir de allí, el dominio fue y vino, alternándose ambos conjuntos en el liderazgo. Cuando parecía que el “xeneize” tenía mejor cierre (un punto de saque de Nicolás Uriarte lo dejó a su equipo 18-21), emergió a puro corazón el local, que levantó una desventaja incluso peor (19-23). En ese tramo, el destacado resultó Giustiniano. Y el retorno de los centrales que, después de precisas recepciones, fueron habilitados una y otra vez por Finoli. Con el público en vilo, BAU dispuso de 4 set-balls pero no consiguió ponerle la firma al segmento. Y entonces, las oportunidades pasaron al bando contrario, hasta que después de un largo rally, lo definió Mauricio Arrúa por zona “2”.
Lineal al extremo resultó el tercer capítulo. Casi no pudieron sacarse ventajas en las diferentes facetas del juego y, por ende, tampoco establecer brechas en el resultado. Punto a punto llegaron al tramo decisivo, cada uno con sus mejores armas: BAU usufructuando los dividendos por el centro de la red y, como segunda opción, a los puntas o a Milinkovic. Boca, apostando casi todo a ganador al imparable Domínguez, y la compañía de Nicolás Bruno, quien aportó en recepción y en ataque.
El partido fue subiendo en tensión y tras un bloqueo notable de Hernández a Domínguez, BAU se adelantó 11-8 y a partir de allí dominó con amplitud el capítulo, con la solidez de Giustiniano y Radtke para bloquear (14-9 y 20-12). Los positivos ingresos de Joao Kulauskas y Juan Pablo Hatrick dispuestos por Marcelo Gigante no modificaron demasiado y el quinto set volvió a ser una realidad.
En el tie-break, el bloqueo de Boca funcionó bien y cuando Guillermo García se estrelló contra una doble pared, el visitante obligó a Kantor a pedir un tiempo de descanso (6-9). Entonces, BAU a puro corazón acortó distancias (9-10) e incluso tuvo un match-ball, gracias a una enorme racha al saque de Giustiano. Pero como toda la noche, la última palabra la tuvo Domínguez y Boca se llevó su premio.
La camiseta de Marcos
El emblema de Buenos Aires Unidos, Marcos Milinkovic, pese a que su ánimo y el de todo el equipo no era el mejor tras la derrota, entregó en mano su camiseta original a Liliana Díaz, quien salió favorecida en el concurso organizado por el tradicional programa radial deportivo “Juego Limpio”, que se emite por FM 91.3 La Red en el mediodía marplatense.
Para alentar a BAU
La dirigencia de Buenos Aires Unidos ha dispuesto un servicio de transporte gratuito para concurrir a los partidos de la próxima semana en Concepción del Uruguay. Serán dos viajes. Uno el martes y otro el jueves, en ambos casos con partida por la mañana y regreso a Mar del Plata después de cada partido (son unos 750 kilómetros hasta la localidad entrerriana). Sólo hay que anotarse a través del sitio Bau Vóley en la red social Facebook.
Síntesis:
Buenos Aires Unidos 2
Juan Ignacio Finoli, Marcos Milinkovic, André Radtke, Ihosvany Hernández, Mariano Giustiniano y Guillermo García. Líbero: Martín Meana.
DT: Waldo Kantor.
Ingresaron: Gonzalo Campaña, Bruno Vinti, Tomás Layús.
Boca-Río Uruguay Seguros 3
Nicolás Uriarte, Marcos Domínguez, Francisco Russo, Maximiliano Gauna, Nicolás Bruno y Mauricio Arrúa. Líbero: Facundo Santucci.
DT: Marcelo Gigante.
Ingresaron: Joao Kulauskas, Juan Pablo Hatrick.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Nicolás Casado y José Luis Barrios.
Parciales: 25-20, 31-33, 24-26, 25-18 y 15-17.
Público: 800 espectadores.