La decisión de Nicolás Lauría (Vamos Juntos), el primer concejal del intendente Guillermo Montenegro, proveniente de UATRE, el sindicato de Gerónimo Venegas, causó entre sorpresa y asombro en el oficialismo.
Se descontaba que acompañaría el pedido del Departamento Ejecutivo, en este acto representado por Santiago Bonifatti, en la reunión conjunta que celebraron para encausar un pedido de aumento de la CAMETAP, para llevar el boleto urbano a $ 45, 12.
Finalmente, Lauría se abstuvo y dejó tecleando a Juntos por el Cambio, ya que la votación de la Comisión de Legislación, que debe efectuarse mañana, también la integra el concejal “díscolo” en esta ocasión.
La ropa la salvó Acción Marplatense, con la abstención de Horacio Taccone, que permitió aprobar un nuevo valor de $ 35,24, que entraría en vigencia probablemente la semana próxima, si sortea la Comisión de Legislación, clave en estos asunto, que preside la radical Cristina Coria. El kirchnerismo votó en forma negativa, obviamente, ya que impulsa que se mantenga el servicio nocturno, funcionando con menos pasajeros que un remise.
Se abrió así, otro frente en el complicado contexto de conducción municipal, con un oficialismo que exhibió una muestra de agrietamiento inesperado, en un tema explosivo en todas las grandes ciudades del interior del país.
“Soy una cara nueva que viene a refrescar la política de Mar del Plata”, expresó Lauría oportunamente, cuando tuvo la responsabilidad de ser en ciernes un intendente alterno en el período 2019 / 2023.
En este tren de “refrescar la política”, o por lo menos en su intento, se entiende que esta “cara nueva”, pero realmente desconocida en la política local, no represente una primera movida de aislarse de Juntos Por el Cambio.
Aunque deja lugar a algún otro tipo de especulación, que deberá ordenar el intendente municipal quien confió en Lauría nada menos que para encabezar la lista de concejales ganadora el 27 de octubre. El tablero exhibe un sacudón político, que se sabe cómo empezó pero que no se sabe cómo termina.
Otros compañeros de ruta de quienes se identifican con el sindicalista Gerónimo Venegas, han dado el salto hacia el Frente de Todos, o han formado un bloque independiente con quienes se separaron de Juntos Para el Cambio, en otros ámbitos legislativos, nacional, provincial y municipal.
Con toda la adversidad que enfrenta el servicio del transporte público de pasajeros, con tarifa autorizada desde 2019, con atraso en la llegada de subsidios de Nación y Provincia, con la caída del número pasajeros y los reclamos incendiarios agitados por Pablo Moyano. La Nación y la Provincia se borraron y hacen recaer el precio de las actualizaciones en el bolsillo de los usuarios.
Previamente también sorprendió la actitud de Lauría, que ya había dejado desacomodado al D.E. en el tema del “defensor” Salomón, que inexplicablemente aún permanece en el cargo mientras se lo investiga, con clara protección política. ¿Cuál es el compromiso de Lauría en este caso, para dejar pegado al oficialismo? Sería un antecedente que habla de complicaciones en el atado del paquete que administra Montenegro.
Cobraban subsidios con choferes fantasma. Que pasó con esa causa?
Y del choque del Secretario de Vilma con el auto importado del principal “dueño” de las empresas de Transporte?
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