Juan Imbert, el autor del gol para Aldosivi que volvió al triunfo
Y un día triunfó el “Tiburón”. Fue por la mínima, ante Villa San Carlos en condición de visitante. Por la decimocuarta fecha de la B Nacional.
Un primer tiempo sencillamente para el olvido con mucho miedo a ganar demostrando porque son los colistas de la tabla. Demasiados errores y pocas ideas a la hora de hilvanar algo de fútbol. Hasta la tarde se nubló de golpe describiendo lo oscuro que fue la primera mitad.
El resultado fue el esperado: un rotundo “cero” para los dos últimos del torneo.
Los de Berisso intentaron un poco más que los marplatenses pero gracias a Dios y a todos los Santos, el juez de la contienda Carlos Córdoba, decretó el final de una verdadera película de terror.
La primera aproximación en el encuentro para el “Tiburón” se concretó al minuto del segundo acto, con un disparo desde lejos por parte de Leonardo Baima que Sessa contuvo con susto.
Antes de los 15 del complemento Darío Franco movió el banco adentro el pibe López afuera el volante Baima.
Todo siguió de la misma manera. Mal jugado y aburrido. El extremo Juan Imbert con otro zurdazo desde afuera intentó doblegar al uno de la “Villa”, pero su remate terminó en la nada.
Dentro de la intrascendencia, sobre el minuto 19, nuevamente el ex Boca Imbert, rescató un balón perdido en la mitad del campo y encaró al golero Sessa, después de una corrida interminable, decretó la apertura del marcador.
Minutos después una vez más los portuenses tuvieron la oportunidad de liquidar el match. Federico Chiapello definió de muy mala manera por encima de la humanidad del “Gato” Sessa.
Los orientados por San Esteban demostraban porque están últimos en la competición ya que casi no inquietaron a Campodónico
Más tarde a los 30 a través de un balón parado, un cabezazo del ingresado Andrés López pasó cerca del arco de San Carlos.
Pero en el final se dio lo más emocionante del cotejo. El delantero ex Independiente, Gino Clara, tuvo el empate pero su derechazo se estrelló en el travesaño devolviéndoles el alma al cuerpo a los jugadores del “Tiburón”.
Que sin jugar para nada bien logró ganar después de 13 fechas, y por fin sumar de a tres, en un campeonato que lo tiene peleando por el descenso.
