El seleccionado argentino de futsal perdió ayer la final del Mundial de Lituania ante Portugal por 2-1 y no pudo revalidar el histórico título logrado hace cinco años en Colombia.
Pany marcó los dos goles del conjunto luso, que se consagró campeón del Mundo por primera vez en la novena edición del torneo organizado por FIFA.
Ángel Claudino hizo el gol del descuento para Argentina, que en el último segundo de la final disputada en el estadio Kaunas Arena tuvo la oportunidad de empatar. Pero el tiro de Santiago Basile se estrelló en el palo.
En el primer tiempo, el equipo argentino sufrió la expulsión de Cristian Borruto, quien le pegó una piña en el estómago a Ricardinho.
La derrota marcó el final del sueño del bicampeonato para el equipo albiceleste que defendía el título conseguido por primera vez en Colombia 2016 y en la semifinal se dio el gusto de eliminar a Brasil, máximo ganador del torneo con cinco trofeos, que terminó en el tercer puesto tras vencer a Kazajistán (4-2) en la antesala de la definición.
El seleccionado argentino también cortó un largo invicto, ya que su última derrota había sido en la final de la Copa América 2017 que perdió ante Brasil en San Juan.
El equipo dirigido por Matías Lucuix estuvo a la altura de la final y mereció empatar por lo hecho en el segundo tiempo. Aunque la fortuna estuvo del lado de Portugal.
La final también tuvo una importante incidencia de las decisiones arbitrales ya que la expulsión de Borruto se decidió después de revisar la jugada en VAR y también hubo una mano en el área no cobrada a favor de la Argentina en el segundo tiempo.
Luego de una primera parte muy pareja y con pocas situaciones para romper el cero, a los 13 minutos sucedió la acción que cambió el rumbo del partido, ya que Borruto, máximo goleador histórico del seleccionado, le pegó una piña en el estómago a Ricardinho. El argentino fue expulsado tras la revisión de la jugada en el soporte de video (VIR por las siglas de Video Instant Replay) que se implementó por primera vez en este Mundial.
En una final muy cerrada y disputada era importante evitar los errores pero uno de los jugadores más experimentados del equipo cometió uno y se despidió de su cuarto Mundial con una triste imagen.
Portugal supo aprovechar la penalización contra Argentina en los dos minutos que jugó con un jugador más y justo en el mismo momento que ingresó Basile para completar el quinteto, Pany sacó un remate inatajable para Nicolás Sarmiento para marcar el 1-0.
Argentina sintió el golpe pero sobre el final del primer tiempo pudo armar buenas jugadas de ataque y a los 17m. Alan Brandi tuvo una buena situación para igualar el encuentro.
En el inicio del segundo tiempo, el combinado albiceleste se mantuvo en partido pero sufrió en los primeros minutos, sobre todo una gran jugada de Erick que pegó en el travesaño.
Cuando el seleccionado buscaba el camino para encontrar el empate, Portugal hizo el 2-0 a los 8 minutos, después de una jugada de córner que finalizó nuevamente Pany.
Sin embargo, Argentina sacó del medio y unos segundos después, Ángel Claudino armó una gran jugada individual y con fuerte remate pudo descontar para poner a la Argentina en partido, otra vez.
Lo que pasó después fue todo protagonismo del equipo argentino que tuvo varias acciones de peligro para marcar la igualdad.
Primero lo tuvo “Kiki” Vaporaki, después Matías Edelstein, también Claudino pero, por fallos en la definición y la gran figura del arquero Bebe, no pudo concretar.
A falta de cinco minutos, Portugal llegó a la quinta falta y cuando restaban tres, el DT Lucuix dispuso el ingreso del arquero-jugador para intentar superar la defensa rival.
A los 17 minutos y después de un remate de Alan Brandi, Argentina pidió la revisión de una mano de Joao Matos en el área, pero a criterio de los árbitros no fue penal y eso generó malestar en el plantel argentino.
Aún así, Argentina luchó hasta el final y en el último segundo del partido, el citado Basile estrelló un zurdazo en el palo izquierdo de Bebe que hubiera significado el 2-2 y la posibilidad de llevar el partido a la prórroga.
Argentina cayó de pie y si bien no pudo revalidar el título conseguido hace cinco años en Colombia demostró que está seguir en la élite del deporte.
Ahora el desafío argentino para la disciplina será continuar con el desarrollo y profesionalización de la liga de AFA y en el seleccionado se vendrá una etapa de recambio ya que muchos de los diez campeones del Mundo seguramente jugaron su último partido con la camiseta albiceleste.