La techada del mundialista arrumbada, clausurada, ícono de la ciudad en una postal que es la imagen de la decadencia, mereció una reunión con el Chiqui Tapia con la casa de la selección, el lugar para Messi que se está construyendo en Miami. Una foto que nos transporta al 2030 en una eventual subsede SIN la participación de Argentina.
La desintegración de la Secretaría de Cultura como tal, encastrada ahora en el EMTUR “actuando de facto”, como sostuvo el edil Amalfitano, se reconfiguró en una mini reducción de los cargos políticos, para justificar la desatención de los responsables que dejaron a nuestra delegación con los bolsos en la mano, pero sin los pasajes para competir en los juegos bonaerenses.
Carla Ardanaz sorprendida en Italia en viaje oficial, casi en modo Insaurralde, y la explicación remonta a poner en agenda una visita al Vaticano, para que Mar del Plata forme parte de la agenda del Santo Padre en una eventual llegada en 2024, en su ya dilatado intento de visitar nuestro país luego de haber visitado todos los rincones del mundo.
Salir de los problemas de gestión con camuflaje es un arte que no resulta, sino que ya fastidia, lo real es un estadio destruido, un abandono de una pésima gestión en Cultura y una vidriosa explicación de una funcionaria que funciona de ambos lados del mostrador desde su cargo público.
Ardanaz captura desde un cargo clave y gestiona desde su especialidad, un puente propio con vínculo directo al DE con empresas, inversores y cámaras empresariales, y en ese lugar quien dice puente dice pauta. La caja para hacer la política que perdió Montenegro en 2019 en la Secretaría de Medios de la Provincia de Buenos Aires.
Carla ha demostrado su eficiencia para sentarse en la mesa chica, como cuando tuvo que sostener a Gustavo Pulti para mantenerlo competitivo de Raverta y restarle los 9.000 que permitieron la luz mínima al actual intendente.
Las figuras en las sombras se confunden, pero hoy es la excluyente fuente de recursos para apostar a la territorialidad, son los mayores contratos de empresas servicios, de obras y excepciones de la MGP, que además hacen su aporte de satélites como referentes. Un clásico circo de la política, una pata en cada mostrador. Debió pelear el fondo de promoción turística, esos cientos millones que se le iban al EMTUR.
Lo hicieron Gustavo Marangoni con Daniel Scioli en el Banco Provincia, Pepe Albistur en gobiernos peronistas, Guillermo Seita consultor y ex funcionario menemista, todos trajes a medida y en el caso Ardanaz viene remando en su cometido desde hace años haciendo base en Mar del Plata.
El cartel de Management And Fit con Mariel Fornoni fue una apertura y apostó a un desarrollo local a través de propagarse en sus servicios por demanda de Gustavo Pulti. El 2019 fue un año electoral presto para volver funcional Acción Marplatense y sostener competente a Pulti.
El armado contaba como respaldo a la Secretaría de Medios Públicos de la Provincia de Buenos Aires, que tenía como opción excluyente convertir a Montenegro en intendente de General Pueyrredon, un verdadero objetivo político en toda la Provincia de Buenos Aires.
El kirchnerismo se quedó con el poder en la Nación y la Provincia y el PRO debió absorber 132 cargos en la administración municipal. Mar del Plata hizo las veces de La Matanza de Vidal y duplicó su planta política en relación al gobierno de Carlos Fernando Arroyo. Montenegro acordó en función de la territorialidad del PRO, compromisos políticos que hoy impactan fuertemente en el gasto público.
Hablando en plata Juntos Por el Cambio fue activista de la desestabilización de Arroyo, con la inestimable colaboración del multimedios La Capital. Florencio Aldrey Iglesias dispensó de recursos abundantes para operar sobre Arroyo, la Secretaría de Medios de la Provincia fondeó a Montenegro 2019 (en realidad desde 2018) y como estrategia sostuvo chances expectantes de Gustavo Pulti para morder votos de Raverta y el Frente de Todos.
En esta estrategia cobró mayor vigencia Carla Ardanaz quien accedió en primer lugar como integrante de la Casa de Mar del Plata en CABA y luego como vicepresidente del EMTUR.
Mariano Mohadeb no aceptó la titularidad del ente de Turismo Municipal y canjeó por ser el titular de la Casa de Mar del Plata en CABA, refugiándose luego en el equipo de Fabián Perechodnik, como una prolongación de Vidal en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires. Hoy el valor ponderado de un legislador bonaerense, como Alejandro Rabinovich, está en el orden de los $ 450.000.000, anuales, todo se ventilará si sigue adelante el “Caso Chocolate”.
Son otros números que no soporta el presupuesto de la MGP, pero cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.