El rápido aumento del número de los contagios por coronavirus en Alemania llegó al punto de que muchos hospitales alcanzaron su límite de capacidad por falta de camas de terapia intensiva y también del personal médico y de enfermería necesario.
Eso se desprende del llamado Registro de Cuidados Intensivos DIVI, gestionado por la Asociación Interdisciplinaria Alemana de Cuidados Intensivos y Medicina de Emergencia (DIVI) junto con el Instituto Robert Koch (RKI): hay 19.373 camas de terapia intensiva en los más de 1.200 hospitales de Alemania, pero solo unas 7.145 tienen un nivel de cuidados alto, es decir, solo en esas camas se puede dar a los pacientes ventilación invasiva.
Según el registro de cuidados intensivos de la DIVI, 3.845 pacientes de Covid-19 están recibiendo actualmente cuidados intensivos. De ellos, 1.968 requieren ventilación invasiva. En las últimas 24 horas, 292 nuevos pacientes ingresaron en las unidades de cuidados intensivos. Esto significa que solo quedan 1.757 camas de cuidados intensivos de alto nivel en toda Alemania.
En algunas regiones como Baviera, Turingia y Sajonia, donde las cifras de infección son especialmente altas, el nivel de ocupación de camas es mucho mayor.
Según el presidente de la Asociación Médica de Sajonia, Erik Bodendieck, las unidades de cuidados intensivoscorren el riesgo de quedar saturadas en los próximos días. Pronto, aseguró, en algunas regiones del estado, “dos pacientes podrían tener que competir por una cama”.
De esta manera, se corre el riesgo de que se produzca una situación de triaje, es decir, que se debe dar preferencia a los que tienen más posibilidades de éxito en el tratamiento. Los no vacunados tendrían las peores posibilidades de sobrevivir.
El término triaje se refiere a la decisión médica de qué pacientes son tratados primero o no reciben tratamiento intensivo cuando las capacidades de tratamiento son escasas debido a la gravedad de sus casos u otros factores.
En Alemania no existe una ley de triaje que regule explícitamente cómo deben decidir los médicos sobre la vida y la muerte en situaciones de emergencia. Recientemente, siete sociedades médicas elaboraron las correspondientes recomendaciones de actuación para el triaje en tiempos del coronavirus. Su objetivo es facilitar la toma de decisiones y establecer normas éticas uniformes en la medida de lo posible.
A la hora de la verdad, los médicos tienen que decidir únicamente en función de las perspectivas de éxito clínico. Los factores decisivos son el estado de salud general, la gravedad de la enfermedad, el nivel de oxígeno en la sangre o si el paciente tiene enfermedades preexistentes, como una enfermedad renal avanzada o un cáncer o una insuficiencia cardíaca pronunciada.