El vicegobernador Gabriel Mariotto reiteró la necesidad de una reforma estructural del sistema carcelario y se mostró preocupado por la situación de las unidades de detención bonaerenses. En los últimos meses cinco reclusos se fugaron sólo del penal de Batán.
Gabriel Mariotto reiteró su pedido de una reforma estructural del sistema carcelario de la Provincia y afirmó que está “preocupado” ante la situación de las unidades de detención en territorio bonaerense.
En ese sentido, aseguró que en las cárceles bonaerense se ve una degradación humana “muy violenta y angustiante “ y enfatizó: “existe una diferencia grande entre los servicios penitenciarios bonaerense y federal.
En tanto, la Justicia de Mar del Plata investiga si el preso que escapó el sábado pasado del penal de Batán haciéndose pasar por otro interno que debía ser excarcelado ese día, contó con la complicidad de algún agente del Servicio Penitenciario Bonaerense.
En esa línea, el juez de Garantías 2 de Mar del Plata, Saúl Errandonea, ya firmó la orden de captura del evadido, llamado Agustín Lapenta Díaz, y un fiscal marplatense solicitó informes al Servicio Penitenciario Bonaerense y comenzó a tomar declaraciones a los distintos agentes que se hallaban en ese momento de guardia.
Según las fuentes judiciales y policiales, todo ocurrió durante la tarde del último sábado, cuando personal de trámites judiciales de la Alcaidía de Batán convocó a un recluso de apellido Cisneros Figueroa, ya que tenían que notificarlo sobre su excarcelación ordenada por un juzgado marplatense.
Este interno se hallaba allí alojado en calidad de procesado, no condenado.
Sin embargo, el que se presentó en la oficina de trámites judiciales fue otro preso, Lapenta Díaz, quien se hizo pasar por Cisneros y, tras la notificación, salió por la puerta principal del penal.
Esta es la segunda evasión que se registra en la Unidad Penitenciaria 44 de Batán en los últimos dos meses.
El 2 de junio último, cuatro internos huyeron en el horario en que se televisaba el partido por las Eliminatorias del Mundial de fútbol entre Argentina y Ecuador.
Los cuatro presos treparon el paredón perimetral con una cuerda hecha con sábanas y, tras caminar por el borde, se lanzaron hacia un sector desde el cual consiguieron salir del predio.
Los investigadores policiales lograron recapturar a tres de los cuatro presos.
Télam
No tengo duda que los presos viven una situación penosa, angustiante (angustiosa), violenta pero eso lo hubieran pensado antes. Acaso ¿cómo fue la situación que vivieron sus víctimas antes de ser secuestradas, golpeadas, robadas o asesinadas sin posibilidad de defenderse? Y encima tenemos que alimentarlos…