Apuntó contra la presencia de “determinados personajes como centro de la escena” y volvió a apuntar contra los estudiantes extranjeros.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, negó este miércoles que el Gobierno busque cerrar las universidades, cuestionó la participación opositora en la marcha y volvió a apuntar contra los estudiantes extranjeros.
“Las universidades no se van a cerrar, no va a estar jamás en una agenda nuestra cerrar una universidad”, afirmó en su habitual conferencia de prensa. No obstante, se refirió a la posibilidad de arancelar el estudio universitario o cobrarle a estudiantes extranjeros.
“El arancelamiento es una discusión que, en tal caso, tendrán que darla las universidades. Es razonable que se priorice la educación de un argentino y no de una persona que viene solo a estudiar y que después solo se lleva el aporte de los argentinos y no devuelve nada por esa educación que se llevó con él para el resto de su vida”, remarcó.
En relación al rol opositor, consideró: “Si fue para que nosotros, como Gobierno, no impulsemos el cierre de las universidades, fue una marcha equivocada, porque claramente no es que nosotros no lo tenemos en agenda”.
Y realizó una acusación: “Eso fue evidentemente algún sector con determinados intereses que logró imponer ese título que está lejos de ser compatible con nosotros o con nuestra ideología”.
“Si hubo un grupo de dirigentes, de líderes piqueteros que se encargó fervientemente de convencer a terceros de que nosotros vamos a cerrar la universidad pública, les han mentido. Nunca se nos hubiese ocurrido siquiera cerrar las universidades, estamos a favor de la educación pública y la vamos a defender tanto como aquellos que quieren una educación pública de calidad, que les garantice un futuro y que los ponga en los primeros estratos del mundo”, añadió.
En ese sentido, Adorni agregó que la participación de dirigentes políticos en la movilización de ayer “transformó un reclamo genuino en una marcha política opositora”, y volvió a reclamar que se auditen los fondos universitarios: “Las universidades no son gratis, son no pagas para el que estudia; la pagan los argentinos”, indicó.
“Solo es sostenible una educación pública de calidad en el camino que estamos transitando, de equilibrio de las cuentas públicas y, por supuesto, de las auditorías que creamos convenientes en pos de entender un poco en qué son utilizados los fondos”, planteó Adorni.
“Marcha genuina”
Si bien realizó varios cuestionamientos a las motivaciones y a los participantes de la movilización, consideró que fue “una marcha genuina”.
“Es genuina cuando los jóvenes sienten que el futuro académico está en riesgo y cuando sienten que están pasando cosas que a ellos les afectan. Lo que no quita que no se van a cerrar las universidades, no se van a quedar sin presupuesto, no se van a quedar sin pagar la luz. Queremos que el dinero público le llegue al alumno y las auditorías son un pilar fundamental en todo esto”, insistió. (DIB)