La cercanía entre Vladímir Putin, presidente de Rusia, y Roman Abramovich, el dueño del Chelsea de la Premier League, es de público conocimiento y debido al conflicto bélico entre el país ruso y Ucrania, el empresario se encuentra en “momentos de incertidumbre”. Durante una reunión de negociaciones entre los dos países en guerra que éste asistió, trascendió que sufrió un “posible envenenamiento”.
“Después de la reunión en la capital ucraniana, Abramovich, que ha viajado entre Moscú, Lviv y otros lugares de negociación, así como al menos dos miembros de alto nivel del equipo ucraniano, desarrollaron síntomas que incluían ojos rojos, lagrimeo constante y doloroso y descamación de piel en sus caras y manos”, expresó Wall Street Journal, periódico estadounidense, en un comunicado.
A principios de este mes, el dueño del Chelsea formó parte de una de las reuniones para la negociación de la paz entre Ucrania y Rusia, en Kiev. Luego de la misma, transcendió por medio del periódico estadounidense que Abramovich había presentado síntomas de envenenamiento.
Por otro lado, debido a las fuertes sanciones que se están imponiendo por la guerra en el este de Europa, Abramovich “se vio obligado a toamr la decisión de vender el Chelsea”. En los últimos días, trascendió que el empresario podría ya tener una fecha estimativa de la venta del club.
The Telegraph, medio de comunicación inglés, reveló que durante los días siguiente los interesados en comprar el club podrán acercarse a las instalaciones ubicadas en Londres, en Inglaterra, para recorrerlas y el próximo 11 de abril de este año se definirá el comprador final.