Scioli suma actos frívolos. Parece no tomar en cuenta los sucesos que vive su provincia. Juega al tejo, va al teatro, pasea entre los turistas, inaugura museos, mientras persiste en la utilización de un discurso, que definitivamente lo ha alejado su su máximo objetivo político. Ya está afuera de la carrera presidencial.
Arden los pastos. Hoy fue la autovía Juan Manuel Fangio a la altura de Maipú, desde hace una semana 50.000 hectáreas en Sierra de la Ventana, en los cerros de Tandil y en el oeste de la Provincia. Este dantesco cuadro donde se mezclan, altas temperaturas, sequía y vientos fuertes, son un reflejo de la realidad que el gobernador Daniel Scioli intenta eludir desde Mar del Plata, en suites de los Hoteles Hermitage y Gran Hotel Provincial, donde busca refugio y protección de la prensa adicta.
Pero aún más devastadora que el fuego, es su propia gestión. El jueves 2 fue necesario la presencia de la Policía Bonaerense (Operativo Sol) y la Prefectura Naval, en los peajes de Samborombón y Maipú de la Autovía. Los efectivos fueron desplazados a esos lugares, ante el fuerte rechazo al aumento del 35 % del peaje en las rutas que conducen a la costa, justo en el momento de mayor circulación, estaban programados cortes organizados por productores agropecuarios y cámaras de transportes rurales de la zona.
Mientras el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el Ministerio de Seguridad de la Nación, asistían a los afectados por los cortes de luz, los vecinos de Lanús, Avellaneda, Quilmes, Berisso etc. eran abandonados a su suerte, por la Provincia de Buenos Aires. Scioli no atendió su situación y los dejó a merced de EDESUR.
Pero ni bien pudo Scioli manoteó la caja con la promesa de hacer obras. Son $ 400.000.000.- de EDES, EDEN y EDEA, pero existe una clara sospecha, esos fondos tendrán otro destino: aplacar la sed de un presupuesto agotado a pesar de los aumentos aplicados en todos los órdenes por la administración Scioli. ¿No es más fácil controlar las empresas a través del OCEBA (Órgano de Control Eléctrico de la Provincia de Buenos Aires).
Cuando la Policía Bonaerense cobre el mensual enero, caerá en la cuenta que fue engañada. Y correrá la misma suerte que Entre Ríos y Chaco por ejemplo. Silvina Batakis, la ministra de Economía de Scioli, lo reconoció en su despacho ante intendentes que no responden al oficialismo. El aumento es sobre las horas CORES y los adicionales, pero es sólo del 13 % sobre el monto remunerativo. Ahí habrá otro problema, el jefe de la Policía Hugo Matzkin fue el garante del acuerdo. Hay que recordar que Mar del Plata fue el último foco del reclamo de la policía.
Trabajadores de la Salud y la Educación de la Provincia, ya se pintan la cara para ir por el mismo reconocimiento que la policía, pero se desconoce cómo será la liquidación de haberes, la sorpresa será cuando cobren.
Scioli está desesperado porque Sergio Massa se escapa en las encuestas y queda fuera de la carrera presidencial. Su gestión está siendo socavada por los mismos problemas que llevaron al kirchnerismo a la derrota, inflación e inseguridad. ¿Cuál sería la razón por la cual la ciudadanía utilice otra vara para medirlo? No hay ninguna. Scioli fleta micros gratis ploteados entre Las Toscas y el Museo de Arte Contemporáneo, apela a vacíos métodos proselitistas, que no le arrojan resultados políticos positivos.
Scioli no logrará nunca concebir con los K, es un rechazo natural que produce su tibieza, un híbrido de cuna menemista, que deberá pagar el verdadero costo político de haber perdido la provincia y por ende haber provocado el entierro kirchnerista, “confiado” a su cuidado electoral. Ya con escaso resto, no le queda ni para una guardia de cenizas, y el fuego volverá para consumirlo todo, para ello, sólo falta que una leve brisa avive las llamas.
Jorge Elías Gómez