Por Cristian Ariel Mangini
Identidad sustituta (Surrogates / 2009 / Estados Unidos / 104 minutos)
Director: Jonathan Mostow
Guión: Michael Ferris y John Brancato. Adaptación del cómic “The surrogates”(2005) creado por Robert Venditti y Brett Weldele.
Reparto: Bruce Willis, Radha Mitchell, Rosamund Pike, Boris Kodjoe, James Cromwell, Ving Rhames.
Sala y horarios: Cinema Los Gallegos (Todos los días: 16:35, 18:30, 20:30 y 22:30. Sábado y domingo también: 14:35. Viernes y sábado también: 00:45)
Si uno hiciera un racconto, podría ver que desde finales de los noventas hasta este año el número de distopías que ha planteado la gran y pequeña escena cinematográfica mundial ha incrementado notablemente. Las hay de mediana y mayor calidad, con guerras o planteos de una sociedad autodestructiva o en decadencia, las hay con mayor o menor cantidad de efectos visuales, pero lo cierto es que su proliferación tiene un matiz político y social que no deja de ser interesante para contextualizar con la situación que atraviesa el mundo y su porvenir, como una expresión pesimista del futuro. No extraña entonces esta propuesta de Jonathan Mostow, director de la irregular pero disfrutable Terminator 3, que con solvencia continúa desempeñándose dentro de la ciencia ficción para presentar un mundo donde el aislamiento y la disociación a partir de un avatar cibernético son moneda corriente. La cercanía de este elemento, que ya puede plantearse con videojuegos o salas de chats, plantea precisamente la alienación del ser humano ante la posibilidad de presentarse en otro entorno bajo otras características y sus consecuencias. Y allí reside el principal gancho de esta adaptación de una exitosa novela gráfica que comenzó a editarse en el 2005, dado el interés del guionista Robert Venditti por gente que se obsesiona con sus proyecciones en Internet lo suficiente como para perjudicar el trato con su círculo social. La cuestión es que este thriller se sitúa en el año 2054, en un futuro en el cual los humanos viven aislados y se comunican a través de robots sustitutos. Allí, un agente del FBI abandonará su hogar por primera vez en años, para investigar la muerte de otros sustitutos. Una propuesta que ofrece intrigas y un trasfondo social que sólo se nos presenta lejano en apariencia, que además cuenta con una batería de efectos especiales destacable, y un director que conoce el género, sin lugar a dudas merece ser un film recomendado.
Boogie, el aceitoso (2009 / Argentina/ 85 minutos)
Director: Gustavo Cova
Guión: Marcelo Paez-Cubells. Basado en el personaje “Boogie, el aceitoso”, de Roberto Fontanarrosa.
Sala y horarios: Cine Ambassador (Todos los días: 16:20, 18:15, 20:10 y 22:10.
Sábado y domingo también: 14:25. Viernes y sábado también: 00:05)
De todas las adaptaciones que se puedan realizar de algún personaje, guión o relato del enorme Roberto Fontanarrosa, la del personaje serializado a partir del año 1972 por su autor en la legendaria Revista Hortensia con Boogie, el aceitoso debe ser una de las más complejas de llevar al cine. Las razones se remiten a una serie de cuestiones fundamentales: la primera es el formato de tira, del cual realizar el guión para un film implica darle otro trasfondo al desarrollo del personaje, con cuestiones que quizá la historieta no explore; en segunda instancia, si bien no sería el primer antihéroe llevado a la pantalla grande, resultará complejo sentir empatía por un personaje que es machista, sádico y mercenario porque es, precisamente, una inteligente parodia de los modelos del héroe norteamericano (con Harry el sucio a la cabeza) y, finalmente, es animación, pero animación para adultos casi en su exclusividad, una franja que habitualmente no llega a nuestros cines y sobre la cual hay que concientizar al espectador (es decir, aclarar que “los dibujitos no son para chicos”). Ante tantas contrariedades sólo hay que decir que la audacia de este estudio no deja de ser algo notable, ya que se trata de uno de los bastiones de la incorrección política, sin embargo también hay cuestiones como un antagonista o una femme fatale que quizá lleve a que varios puristas pongan el grito en el cielo en base a la dinámica de los personajes, particularmente de su protagonista, Boogie. La película está precedida por premios entre los cuales podríamos destacar su selección en el Annecy, uno de los festivales de animación más importantes del mundo, logrando estar entre las diez elegidas para la competencia junto a otros títulos de grandes estudios norteamericanos, europeos y japoneses. El relato cuenta que Sonny Calabria, capo mafia de la ciudad, es llevado a juicio y necesita “callar” a la testigo principal. Sonny delega el “trabajo sucio” a Jim Blackburn, acérrimo rival de Boogie. Herido en su orgullo, nuestro protagonista decide secuestrar a la joven, para demostrar que a pesar de su falta de estado, él sigue siendo el mejor. Ya saben que no son dibujos para chicos, a los que les interese Fontanarrosa les interesará el cauce de la historia, y no deja de ser una alternativa para los amantes del humor negro, negrísimo que cuenta el relato. Después de todo, su creador lo describió como alguien que “ama a Jack, el destripador, y detesta al resto de la humanidad. Su hobby es comprar armas y disparar a los transeúntes desde la ventana de su departamento”.
Los estafadores (The Brothers Bloom / 2008 / Estados Unidos / 104 minutos)
Director: Rian Johnson
Guión: Rian Johnson
Reparto: Adrien Brody, Mark Ruffalo, Rachel Weisz, Rinko Kikuchi, Robbie Coltrane, Maximilian Schell.
Sala y horarios: Cines del Paseo (Todos los días: 17:10, 19:40 y 22:10. Sábado y domingo también: 14:40. Viernes y sábado también: 00:35)
Las películas de estafadores podrían considerarse una especie de subgénero en lo que refiere al thriller, donde se requiere un manejo impecable del suspenso, actores carismáticos y una dirección que sepa dosificar las vueltas de tuerca del guión con inteligencia, sin saturar al espectador. Por nuestras tierras tenemos a un representante que resulta reciente, nada más y nada menos que Nueve reinas del fallecido Fabián Bielinsky, una película que siempre resulta una referencia obligatoria de lo que podríamos llamar “subgénero”, donde los elementos mencionados como requerimientos cierran de manera perfecta. Pues bien, con Los estafadores tenemos una película que sorprendió en la taquilla estadounidense en base a su calidad y que reúne a un elenco formidable con Adrien Brody, Mark Ruffalo y Rachel Weisz. Su director es de la escena independiente y ha sabido colocar hace unos años su nombre en consideración gracias al film Brick, Rian Johnson. A esto, si sumamos secundarios como los talentosos Rinko Kikuchi o Robbie Coltrane, tendremos lo que parece ser una propuesta entretenida y dinámica, con más de una sorpresa bajo su apariencia. El relato cuenta que los hermanos Bloom son los mejores estafadores del mundo. Bloom, ha vivido toda su vida influenciado por su hermano mayor Stephen, el ideólogo de todos los timos. Ahora han decidido realizar su último “trabajo”: El objetivo es una bella y excéntrica millonaria, Penélope. Obviamente, nada será como esperaban y a veces el lobo bien puede estar disfrazado de cordero.