A nadie le cabe duda en el mundo River de que éste es el rumbo. Cuando se transmite el contagio entre el equipo y la gente, se multiplican las energías. Pasó con diez hombres durante 80 minutos, es el mejor ejemplo. Pero lamentablemente hay que advertir, que existen hostilidades, y algunos hechos que intentan dañar y lastimar el camino del retorno.
Habrá provocaciones “Este no es el Sheraton” como le dijeron a Passarella. “Que me traiga un jardinero”, como dijo ¡¡¡Huevo, Huevo!!! Declaraciones en las que prendió el “Chori” con el “Beto” que no sabe cómo hacer para tener algo de protagonismo, en algo, la verdad que ya todo el mundo sabe que quiere a River, pero si lo quiere tanto lo mejor que puede hacer es cerrar la boca, cada vez que habla es para decir giladas. No es el referente que pretende ser, la gente nueva no lo registra, fue un ídolo con la camiseta puesta y ahora estamos hablando de otra cosa. Es increíble que TN en horario central, le haya dado 10 minutos al “Beto”, para hablar de un problema personal con la seguridad del Estadio, porque no pudo ingresar. ¿No es raro que TN le dedique un espacio tan importante a una boludez? daba vergüenza ajena verlo. Le buscan el pico a Orteguita, confundirán a Buonanotte, etc. Hasta el periodismo nos va a buscar.
¿Quién es el intendente de Avellaneda que no quiso recibir a River? Está más preocupado por River, que por la inseguridad de los vecinos en Avellaneda, una de las zonas más castigadas por ese flagelo de la provincia. Política partidaria barata que tiene la obvia intención de perjudicar a River. No descartaría que nos tiren algún muerto a los pies, o refloten causas judiciales aviesas, precisamente para enrarecer el clima positivo. De hecho, se habló de jugadores enfiestados, y también de una celebración de cumpleaños infantil, quisieron transformarlo en una orgía.
La foto era la del pibe Ocampos abrazándose con Almeyda, no el “face – face” de Cavenaghi y el “Chori”, el autogol de carambola de los funebreros, u otra pelea con barras en el Monumental. En la venta de entrada, hay veces que no se sabe ni dónde ni cuándo juega River. Hoy la Primera B supera ampliamente el interés de la máxima división. Pero hay que estar preparado para todos. Para los jugadores adversarios enfrentar a River es el partido de su vida, y para sus clubes, el partido más importante de su historia. “Huevo”, “Huevo” (no es para darle importancia) dijo que había preparado el partido contra River durante todo el verano, sabiendo que River era el primer rival de Brown luego del receso del verano, un extremista. Después fue a Mendoza y se comió tres, del mismo equipo al que River le ganó 3 a 0 con 10 hombres. ¿Por qué no pensar, que todos utilizan la misma lógica que “Huevo”, “Huevo”?.
Hoy las tapas de diarios y suplementos deportivos más importantes se abren con fotos y títulos de River, no con Arsenal – Velez, All Boys – Racing o Unión – Independiente, “La Bosta” es noticia triste, aún cuando están en la cresta de la ola. Esta es una diferencia que hace la gente y que no debe pasar desapercibida. River está devolviendo el precio de la entrada, y fundamentalmente, su juego, su intención y su estilo, hace recuperar el interés, la estética, las virtudes, y que no jodan con el tema de la categoría, usando falsos argumentos. River ha jerarquizado el futbol desde una división, supuestamente inferior.
Si River con la precisa instrucción de Almeyda, no le pone la actitud que está poniendo, nos hubiera ido mal. Este campeonato no se gana con el plus de la jerarquía sino con el mix de la actitud más la aptitud, ahí está la diferencia que espero se refleje ahora en la ventaja de puntos. Hay que tener en cuenta lo siguiente: “La Bosta” salió campeón invicto, el segundo (Racing) como a 10 puntos, ¡¡¡ pero empató 12 partidos!!! ¿Qué clase de campeón es? Los que tienen más vergüenza, se dieron cuenta y ahí están en una mezcla de conventillo y cabaret, propios de la Canosa o de Rial.
Sé que es difícil pedir mesura, cuando hay sentimientos en el medio. Pero River está produciendo una movilización, muy difícil de mensurar. Pero hay que manejar este complejo escenario, donde los negocios ajenos y los intereses enfrentados juegan un papel decisivo. Es mejor estar advertido y ser desconfiado en este momento, mejor prevenir que curar. Creo que muy pocos saben el sacrificio que ha costado volver a la normalidad. Negociar con jugadores que se fueron (Ortega) muy doloroso. Lo de J.J. también. Superar el mal trance de Buonanotte. Pelear con la AFA, dirimir temas en la Justicia (encima Argentina), con las víctimas (que las hubo), con los vecinos de Núñez. Gracias a Dios todo se ha superado en muy poco tiempo, siendo lógicos, responsables, razonables y anteponiendo los intereses de River, era la única forma de salir adelante, mucho temple y conducta.
Parece inútil esta consideración, cuando el horizonte aparece más claro, más nítido. Pero no está demás contener los excesos. Hay que festejar, descargar el sentimiento millonario, pero no descartar que la política de la oposición ponga palos en la rueda. Así es el egoísmo y la mezquindad de quienes buscan poder político dentro del club, y por supuesto no hay que prestarse a ser funcionales a esos impulsos destructivos.
Hay que reparar en otra circunstancia, inevitable. Hace poco en Salta, el gran Santamarina de Tandil, estuvo a punto de hacer saltar la banca. Más tarde en Venezuela, hubo varios enojados, porque a ellos mismos les dolían los ojos de tan mal que juegan. Se llevaban puesto a un entrenador exitoso, ahora irónico, que se siente ganador, pero no convence ni a sus jugadores. Es una involución del espectáculo del futbol. Es anacrónico, les atrasa el reloj. Pero les va bien, en una cosecha de vuelo corto. ¿A dónde pueden llegar así? Si, al cabaret, y una vez más quedó demostrado. El domingo tras el partido con Unión, los relatores pedían que el árbitro termine con el partido, y cuando finalizó los empleados de la televisión pública (que no se fija en gastos) pidieron disculpas a los televidentes, por haber ofrecido la transmisión de un espectáculo muy pobre y sin propuestas atractivas.
Esto es como la gente del 54 %. Ahora parece que están todos peleados entre ellos y andan cazando por el zoológico. Es como que está todo bosterizado.
En cambio con River es todo distinto. Bate récords de público, brilla, gana, lidera y se apresta al rush final, que lo dejará donde corresponde. Esa inercia también deberá ser aprovechada, para prolongar esta refundación de River, que comenzó a gestarse aquel día triste de junio del año anterior.
De todas maneras, esto no se maneja con control remoto. Siempre habrá un expulsado, un penal no cobrado, un gol anulado, alguna reacción, un mal arbitraje, y muchos nos estarán esperando con la cama tendida. Por eso es necesario recordar, que salimos de nuestro Monumental, que hubo muchos daños, sufrimientos y que nos tienen en la mira. ¿De qué habla
el llorón de Pizzi? Es claro que quiere tirarnos el arbitraje encima, es muy burdo y raro, parecía un tipo ubicado.
A cargar las pilas para festejar. Pero sin desentenderse de operativos anti River, que los habrá. Se está gestando una conmovedora fuerza, que me animo a calificar como desconocida en la historia del futbol argentino, incluso superior a aquella gran euforia que provocó el campeonato del ´75, tras las los 18 años sin títulos.
Toda esta sinergia es necesario canalizarla positivamente. Hasta merecería la formación de una comisión de gestión, para no desaprovechar este formidable impulso que generado nuestro querido River Plate. Ya es un fenómeno, hay que hacerlo crecer y que el mundo entero sepa, quién verdaderamente es el más grande de la Argentina. Esta es una escuela, un estilo, que no sabe de renunciamientos, para el orgullo de todos los hinchas. Todo esto es posible con dirigentes confiables y comprometidos, que afortunadamente para River, han sabido enderezar el rumbo. Nunca hay que olvidarse de cuál fue la herencia recibida.
Jo.Go.
(DNI 10.117.606)