Los 18 trabajadores perciben un sueldo inferior a los 1.200 pesos, y realizan labores de reparación de veredas y cateos que debieran otorgar dignidad a las familias involucradas, ya que los trabajos se vienen realizando en forma eficiente. Los contratos son de 2 meses y ahora se vencen nuevamente y no se firmó aún la continuación laboral.
El movimiento de trabajadores desocupados, entiende que les asiste el derecho a un trabajo estable y seguro, y por lo tanto creen firmemente que merecen trabajar en planta permanente y poseer una cobertura social, además de cobrar un sueldo que permita vivir dignamente. La tercerización sigue siendo para los gobiernos una política de ajuste, no sólo denuncian esta irregularidad, sino que luchan para cambiarlo.