Militante de tiempo completo, defendió derechos y actúo siempre de acuerdo a sus convicciones.
Siempre se definió como “DOCENTE por VOCACIÓN, ABOGADA por ELECCIÓN y POLÍTICA por PASIÓN”.
“A mis años solo he defendido mis derechos y he cumplido con mis deberes“, así se expresaba quien fuera diputada nacional e incansable luchadora por los derechos civiles y de las minorías desde su militancia en la UCR, que comenzó en los cuarenta y no se detuvo jamás.
Maestra, e hija de maestros, nació el 14 de febrero de 1912, en Olavarria, provincia de Buenos Aires, y se recibió de Abogada en la Universidad Nacional de La Plata.
En 1946 se afilió a la Unión Cívica Radical permaneciendo en sus filas como militante activa hasta sus últimas horas. Todos los sectores del Partido le han reconocido su coherencia, lucha permanente y sus condiciones de mujer íntegra, perseverante y valiente.
Llegó al Congreso de la Nación, junto con la democracia recuperada en 1983, ejerciendo su mandato de Diputada Nacional durante dos periodos (1983/1987 y 1987/1991). En la Cámara baja fue autoridad de la comisión de Familia, Mujer y Minoridad, desde donde trabajó fuertemente por la ley de divorcio vincular, la patria potestad compartida, la pensión a la concubina, la igualdad de los hijos extramatrimoniales y el derecho de las mujeres de seguir usando el apellido de soltera luego de casada. Fue artífice del cupo femenino en la boletas electorales e impulsora la despenalización del aborto.
En el Radicalismo fue varias veces delegada al Comité Nacional donde ocupó el cargo de secretaria de la Mujer. También integró la Convención Nacional. Multipremiada y reconocida por sus acciones y posiciones políticas, en 2008 recibió el premio KONEX a la trayectoria. El año pasado fue declarada Ciudadana ilustre de la provincia de Buenos Aires y recibió el título Honoris Causa de UNLP.
Fue abogada, pero ella quería ser odontóloga, la imposibilidad de cursar libre y poder continuar trabajando de maestra la llevó hasta la Facultad de Derecho.
En la segunda Presidencia de Hipólito Yrigoyen (1928-1930), fue el propio Primer Mandatario quien le comunicó sobre su cargo docente en la Capital. Uno de los días que el radical disponía del saludo al pueblo en Casa de Gobierno, Florentina –recién recibida de Maestra Normal Nacional- junto a su madre pasaron a conocerlo, notificándose entonces de la designación.
Durante el gobierno de Arturo Illia, presidió la Comisión de Alquileres, desde donde defendió los derechos de las personas sin casa.
En 1954, su ferviente militancia radical la dejó sin trabajo. El Presidente Juan Domingo Perón la cesanteó en el cargo de maestra.
Por su fuerte compromiso con los derechos humanos, durante la dictadura y desde la Asociación de Abogados de Buenos Aires (AABA) impulsó innumerables habeas hábeas en reclamo de desaparecidos.
Sus restos serán velados el martes 2 de agosto, desde las 8 en el salón de los Pasos Perdidos de la Honorable Cámara de Diputados donde familiares, amigos y dirigentes políticos la despedirán.
El Ateneo “LEANDRO ALEM” de la Unión Cívica Radical de Mar del Plata despide a la Dra. Florentina Gómez Miranda fallecida el 1 de agosto de 2011 a los 99 años de edad.
Militante de tiempo completo, defendió derechos y actúo siempre de acuerdo a sus convicciones.
Siempre se definió como “DOCENTE por VOCACIÓN, ABOGADA por ELECCIÓN y POLÍTICA por PASIÓN”.
“A mis años solo he defendido mis derechos y he cumplido con mis deberes“, así se expresaba quien fuera diputada nacional e incansable luchadora por los derechos civiles y de las minorías desde su militancia en la UCR, que comenzó en los cuarenta y no se detuvo jamás.
Maestra, e hija de maestros, nació el 14 de febrero de 1912, en Olavarria, provincia de Buenos Aires, y se recibió de Abogada en la Universidad Nacional de La Plata.
En 1946 se afilió a la Unión Cívica Radical permaneciendo en sus filas como militante activa hasta sus últimas horas. Todos los sectores del Partido le han reconocido su coherencia, lucha permanente y sus condiciones de mujer íntegra, perseverante y valiente.
Llegó al Congreso de la Nación, junto con la democracia recuperada en 1983, ejerciendo su mandato de Diputada Nacional durante dos periodos (1983/1987 y 1987/1991). En la Cámara baja fue autoridad de la comisión de Familia, Mujer y Minoridad, desde donde trabajó fuertemente por la ley de divorcio vincular, la patria potestad compartida, la pensión a la concubina, la igualdad de los hijos extramatrimoniales y el derecho de las mujeres de seguir usando el apellido de soltera luego de casada. Fue artífice del cupo femenino en la boletas electorales e impulsora la despenalización del aborto.
En el Radicalismo fue varias veces delegada al Comité Nacional donde ocupó el cargo de secretaria de la Mujer. También integró la Convención Nacional. Multipremiada y reconocida por sus acciones y posiciones políticas, en 2008 recibió el premio KONEX a la trayectoria. El año pasado fue declarada Ciudadana ilustre de la provincia de Buenos Aires y recibió el título Honoris Causa de UNLP.
Fue abogada, pero ella quería ser odontóloga, la imposibilidad de cursar libre y poder continuar trabajando de maestra la llevó hasta la Facultad de Derecho.
En la segunda Presidencia de Hipólito Yrigoyen (1928-1930), fue el propio Primer Mandatario quien le comunicó sobre su cargo docente en la Capital. Uno de los días que el radical disponía del saludo al pueblo en Casa de Gobierno, Florentina –recién recibida de Maestra Normal Nacional- junto a su madre pasaron a conocerlo, notificándose entonces de la designación.
Durante el gobierno de Arturo Illia, presidió la Comisión de Alquileres, desde donde defendió los derechos de las personas sin casa.
En 1954, su ferviente militancia radical la dejó sin trabajo. El Presidente Juan Domingo Perón la cesanteó en el cargo de maestra.
Por su fuerte compromiso con los derechos humanos, durante la dictadura y desde la Asociación de Abogados de Buenos Aires (AABA) impulsó innumerables habeas hábeas en reclamo de desaparecidos.
Sus restos serán velados el martes 2 de agosto, desde las 8 en el salón de los Pasos Perdidos de la Honorable Cámara de Diputados donde familiares, amigos y dirigentes políticos la despedirán.
Instituto de la Mujer de la UCR
El Instituto de la Mujer de la Unión Cívica Radical de Mar del Plata manifiesta su gran pesar por el fallecimiento de la histórica dirigente radical, Florentina Gómez Miranda, ejemplo de conducta y de ética.
Florentina fue una referencia para la mujer política argentina y de su prolífica labor legislativa, se destacan algunos proyectos de ley que han actuado de bisagra en nuestra sociedad: la patria potestad compartida; el divorcio vincular; la pensión al viudo; la pensión al cónyuge divorciado; la igualdad de los hijos matrimoniales y extramatrimoniales; el derecho de la mujer a seguir usando el apellido de soltera luego de casada; la pensión de la concubina y concubino. También cabe destacar su militancia junto con otras mujeres de diferentes partidos en favor de la participación política de la mujer, que culminó con la Ley de Cupo.
Recibió diversos e importantes premios entre los que se encuentran: Banca de Oro (1986), Premio Alicia Moreau de Justo (1990-1999), Ciudadana Ilustre de Buenos Aires (1999),Mención Especial de los Premios Konex (2008)
La Asamblea de los Derechos Humanos le otorgó el premio “Dignidad 1999”. Su lema en la vida era “Digo lo que pienso y hago lo que digo” y así lo transmitía en cada charla, donde impartía docencia democrática a quien la quisiera escuchar.
Su fallecimiento es una enorme pérdida no sólo para el radicalismo, sino para la sociedad toda, ya que se fue una luchadora incansable de la igualdad de género, de las causas justas y de la democracia.