El presidente del Concejo Deliberante Marcelo Artime, el secretario de Gobierno Ariel Ciano, las titulares de las comisiones de Derechos Humanos y de Calidad de Vida, Leticia González y Verónica Beresiarte, María Juan Rivas de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y la ex detenida política, Mirta Clara, encabezaron el acto por los 34 años de la primera manifestación de la asociación Madres de Plaza de Mayo.
El acto contó con la presencia de los abanderados y escoltas de la escuela Nº 76 “Azucena Villaflor”, y, además, participaron: madres y abuelas de plaza de Mayo, HIJOS, el subsecretario de Control, Adrián Alveolite, el director del Programa de Protección Comunitaria César Ventimiglia, la directora de la Oficina por la Igualdad, Agustina Palacios, la diputada Adela Segarra, el embajador Plenipotenciario, Carlos Cheppi, y los concejales Leandro Laserna y Maximiliano Abad.
En este marco, Marcelo Artime declaró que “hoy es un día en que se habla de coraje y los que tuvieron relación afectiva con los que tuvieron ese coraje y que por ese coraje fueron secuestrados y asesinados seguramente tienen en la memoria conversaciones, imágenes, olores, gustos”.
“Los que no tenemos esa experiencia, lo que podemos tener es principios, ideales, ideología y un camino a seguir. El mejor homenaje es ir contrastando, permanentemente, en la vida pública qué es lo que hubieran dicho, por lo que hubieran peleado, en qué situaciones se hubieran callado y en cuáles hubieran confrontado. Eso me parece que es un deber que tenemos quienes hoy tenemos responsabilidades públicas”, declaró.
Y argumentó “porque se discutían dos modelos de país. Los asesinatos, las torturas y las desapariciones fueron las herramientas para imponer un modelo de país que cuando necesitó mató. Mató en el 55, en el 76, más adelante volvió matar: el 18 19 y 20 de diciembre de 2001”, afirmó.
“Entonces debemos pensar qué hubieran hecho”, aseguró y se preguntó a modo de ejemplo: “¿Hubieran tenido el coraje de estatizar los fondos de las jubilaciones para que sean de todos los argentinos o hubieran quedado cuidando al establishment económico que hacía negocios con las AFJP”.
“Esas cuestiones son la mayor enseñanza que hoy podemos tener quienes estamos en la función pública. Poder pensar qué hubieran hecho con ese coraje y qué hacen hoy las abuelas y las madres con ese coraje. Y nos tiene que servir para ir comparando cuáles son las actitudes que se podrían haber tenido, las que se tienen, cuáles son los silencios y cuáles aquellas confrontaciones que hay que dar hoy”, expresó.
Por último, agradeció a madres y abuelas y adelantó que el año que viene “vamos a tener un mural con los nombres y las fotos de quienes desaparecieron en Mar del Plata en este recinto. Esperemos que estén por muchas décadas porque, sin ninguna duda, tienen autoridad moral y ética para ser custodios de las decisiones políticas que se toman”.
“Muestras de coraje, de perseverancia, de responsabilidad, de amor”
Por su parte, Ariel Ciano manifestó que “uno tiene que analizar los hechos en el contexto político, social y cultural en que ocurrieron para poder llegar a valorarlos en todo lo que implicaron”.
“Pensar en esas madres en plena dictadura que empezaron a recorrer juzgados, cuarteles iglesias y que decidieron ir a la plaza de Mayo a manifestarse hoy hace 34 años. Ese puñado de madres que jamás pensaron lo que iban a generar en el mundo. Eran un puñado de madres con una valentía y coraje admirables que en la época más sangrienta se reunían para pedir por sus hijos”, señaló.
“Ese coraje se vio renovado muchas veces más. Pensemos en esas madres luego del 8 y 10 de diciembre cuando al jueves siguiente sabiendo lo que les había pasado a tres de ellas volvieron a la plaza sabiendo que eran tratadas con indiferencia en el mejor de los casos y tratadas de locas en muchos otros casos. Y siguieron dando muestras de coraje, de perseverancia, de responsabilidad, de amor”, sostuvo.
En la misma línea, el titular de Gobierno apuntó que “no tengo familiares desaparecidos pero uno trata de imaginarse cuando escucha hablar a las madres y cuesta imaginarse el temple que hay que tener para no reaccionar de una manera violenta. Por eso son ejemplo mundial porque han esperado años por justicia. Nos han enseñado a todos”.
Luego recordó un recital de Amnesty organizado en la década del 80. “Ese día cantaron artistas extranjeros y las invitaron a subir al escenario para compartir la canción “Ellas bailan solas” y la verdad es que bailaban solas. Y creo que hoy están acompañados por la gran mayoría del pueblo argentino”.