Hay dudas sobre si el senador nacional de la UCR se suma a la mayoría de su bloque e impide que prosperen las llegadas de Ariel Lijo y García Mansilla a la Suprema Corte de Justicia como pretende el presidente Javier Milei. Ya desde la CC habían expresado sobre los “si” y los “no” de Abad en varias cuestiones y esta oacasión es una más de ellas. Como se sabe el intendente Guillermo Montenegro milita la llegada de Lijo a la Corte Suprema de Justicia, al cual no sólo no cuestiona sino que acompaña la designación. Como se sabe Montenegro ha señalado públicamente que Abad es su único socio político y han hecho una comandita en General Pueyrredon. Ahora bien, ya son conocidas algunas maniobras que lo acercan al mileísmo, desembozadamente como lo hace Guillermo Montenegro. La sociedad política de JxC en vías de extinción se intenta reflotar como una chance más dentro del marasmo político que sufre el país. La actitud de Abad ya es considerada como una pesadilla entre sus correligionarios, abiertamente ásperos con las decisiones, conductas y modos de Milei.
Según señala hoy La Política On Line “Un sector mayoritario del bloque de la UCR se pronunció este viernes a favor de voltear los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla en el Senado, para frenar a Javier Milei y su compulsión a gobernar por decreto. A esa cuenta no solo cargan las designación en comisión de ambos jueces para el máximo tribunal sino también el reciente nombramiento del embajador argentino en Estados Unidos, Alejandro Oxenford”.
Uno de los radicales que participó de la reunión de esta mañana dijo a LPO que “la idea de rechazar los pliegos es para cortar el avance de Milei en defensa del Senado”.
Igual, la discusión en la bancada que preside Eduardo Vischi no está saldada y los legisladores convinieron en retomar el debate interno “en unos días” para ver si pueden llegar a un pronunciamiento unánime que hasta podría ser respaldado por el partido.
Mientras tanto, los radicales mantienen contactos con sus pares del bloque peronista de UP, liderado por José Mayans y Juliana di Tullio, quienes también trabajan para rechazar en el recinto los pliegos. “Hay que frenarlo antes que cierre el Congreso como Fujimori”, apuntó un senador peronista.
“Milei tiene que entender que no puede seguir gobernando por decreto, primero fueron los dos jueces de la Corte y el embajador de Estados Unidos, si no lo frenamos mañana puede nombrar por decreto a Amerio procurador, a los 180 pliegos que tiene y a todos los embajadores”, afirmó a LPO un integrante del bloque radical.
En el diálogo, los radicales tantearon si la avanzada peronista era sólo contra García-Mansilla o incluía a Lijo.”Los dos”, fue la respuesta contundente de una senadora cercana a Cristina Kirchner, que sigue siendo una referencia ineludible en el bloque de 34 senadores peronistas.
Mientras tanto, Martín Lousteau ya fijó posición y firmó con la larretista Guadalupe Tagliaferri un dictamen de rechazo contra García Mansilla, que se suma al que presentó el peronismo con siete firmas. En principio, con eso alcanzaría para llevarlo al recinto porque alcanza con nueve firmas, pero, la firma de José Mayans terminó “disputada” porque el formoseño estuvo ausente el 28 de agosto pasado, cuando se realizó la audiencia pública para la defensa de la candidatura del profesor de la Universidad Austral.
En ninguna parte del reglamento está escrito eso, pero hasta el cierre de esta nota, prevalecía ese criterio por uso consuetudinario y la oposición quedaba a una firma de lograr que se discuta el nombramiento del flamante cortesano en el recinto. Ahí es donde se vuelve clave sumar un voto radical. Uno de los radicales que participa del intento por desbancar a los ministros propuestos por el Presidente confiaba que podían conseguirse las firmas: su apuesta estaba enfocada en los tres colegas de su bloque que integran la comisión de Acuerdos: Maximiliano Abad, Mariana Juri y Carolina Losada.

El correntino Vischi, por su parte, volvió a convertirse en el custodio de los libertarios en el Senado, según el rumor que circulaba desde este jueves. Sus colegas de bloque en la UCR lo acusaban de hacerse eco de presiones de la Casa Rosada para que nadie firme un dictamen, a favor o en contra, de Manuel García Mansilla.
La jugada estaría en sintonía con una maniobra de la bancada de LLA en la Cámara Alta, que escamoteó el dictamen con cuatro firmas por la positiva para que los legisladores que pretendan rechazarlo no alcancen la cifra de 9 sobre los 17 miembros totales de la Comisión de Acuerdos. “Había un dictamen con cuatro nombres pero un senador se lo llevó”, dijo una opositora a LPO.
En el bloque liderado por el jujeño Ezequiel Atauche, que este viernes se encontraba en su provincia natal por el acto de apertura de sesiones que encabezó el gobernador Carlos Sadir, se jactaron de haber retirado el expediente con ese propósito. Sin las nueve rúbricas, ningún despacho puede llegar a debatirse ante el pleno del Senado.
El peronismo, por su lado, afrontaba sus propios dramas: juntó la firma de seis senadores propios y quedó a las puertas de garantizar el tratamiento del pliego de García Mansilla por la inasistencia de Mayans. Lo paradójico es que el día del faltazo del formoseño fue justo la jornada en que Cristina Kirchner ordenó a los senadores de UP congelar los pliegos del profesor de la Universidad Austral y Lijo.

De hecho, la noche anterior a ese día Anabel Fernández Sagasti y Juliana di Tullio le hicieron “una intervención” a Mayans, tal como reveló LPO, que venía de afirmar en el recinto que Victoria Villarruel y el peronismo tenían que “hacerse más amigos”. Incluso, en una entrevista radial posterior, el formoseño consideró que la Vicepresidenta estaba más cerca del peronismo que de Javier Milei y eso le valió una sanción por Twitter de parte de Cristina, que pidió “pericia psiquiátrica” para los que tuvieran esa lectura sobre Villarruel.
Al momento de publicarse esta nota, entre Lousteau, Tagliaferri y los seis senadores peronistas la oposición juntaba 8 firmas en total, para dos dictámenes de rechazo. Si consiguieran una más, podrían llegar al quórum con 37 legisladores en una sesión y voltear el pliego con sólo 25 votos en contra.
“El Gobierno debería retirar los dos pliegos y abrir una negociación para ampliar la Corte, así no queda expuesto a una derrota monumental”, afirmó a LPO otro integrante d ela bancada de la UCR.
El resto de los senadores que integran la comisión de Acuerdos pero no aparecían este viernes firmando ningún dictamen eran, además de Atauche y los tres radicales condicionados mencionados, la tucumana macrista Beatriz Ávila, el misionero Carlos Omar Arce, el correntino Carlos Camau Espínola y el salteño Juan Carlos Romero. Los cuatro, aliados del gobierno de Milei.