La Selección Argentina Sub 23 perdió 1-0 con su par de Francia y fue eliminada de los Juegos Olímpicos de París en los cuartos de final, un encuentro que inició con silbidos al himno nacional y que terminó con incidentes después de la absurda provocación de Enzo Millot al banco del combinado dirigido por Javier Mascherano.
Ni bien se escuchó el pitazo final hubo una erupción en Bordeaux por parte del público francés y sus jugadores también se animaron a celebrar, aunque no sin polémica. Millot, que salió reemplazado sobre el final del partido, gritó y realizó gestos obscenos para festejar frente al banco de los suplentes argentinos y eso fue el disparador para que inicie la polémica, un nuevo capítulo a la animosidad de los anfitriones para con los atletas nacionales como se presenció en Rugby 7s y natación.
El combinado nacional no se lo dejó pasar y saltó a recriminarle el pésimo gesto, con Nicolás Otamendi, Leandro Brey y Lucas Beltrán a la cabeza de la situación que rápidamente se convirtió en una gresca generalizada que involucró a los dos planteles, casi en su totalidad. Minutos más tarde, Ota habló con TyC Sports y relató su versión de los hechos. “Uno fue a festejar al banco de suplentes nuestro. Mas ó menos no entendía bien lo que estaba pasando, pero después me doy cuenta que fue a festejar con los nuestros. Una cosa es festejar dentro del campo con tu gente, lo que quieras, pero después eso no me gustó. Va en cada uno”.
En paralelo, también se observa a Gerónimo Rulli trenzarse con Sildilllia, quien en el complemento también celebró de manera provocativa al lograr un cierre ante Beltrán que el colegiado no sancionó con tarjeta amarilla.
Incluso, se vio cómo la bataola dejó el campo de juego para desarrollarse en el túnel que conecta a los vestuarios, antes de disiparse y definitivamente llegar a su fin con el retorno del combinado francés al campo de juego para celebrar.
Sin embargo, con esa vuelta es que el árbitro Ilgiz Tantashev aprovechó para expulsar a Millot, al ser el responsable del escandaloso cierre al encuentro, por lo que se perderá el encuentro correspondiente a las semifinales ante Egipto.
Justamente con esa vuelta al césped es que se da un gesto que inicialmente pasó inadvertido pero que despertó gran bronca en Argentina, y ese fue la lamentablemente decisión del equipo local de festejar cara a cara con los hinchas del seleccionado nacional; a lo que los propios fanáticos respondieron con gestos recordando la final del Mundial de Qatar 2022 con tres dedos en adelante para representar a la tercera estrella obtenida.
Otamendi se refirió a esa situación en particular y no ocultó su enfado por lo acontecido. “Me da mucha bronca que los jugadores pueden festejar, pueden gozar lo que uno quiera, pero a donde está la gente, los familiares y festejarles ahí a ellos.. Había uno que no se ni como se llamaba (Loïc Badé), que si tiene ganas de festejar que venga donde estamos nosotros y lo resolvemos ahí. Pero me da bronca eso, que les festejen a ellos sabiendo que hay chicos, familiares, no está bueno”, aseguró el capitán del seleccionado.
Las disculpas de Thierry Henry: “No queríamos que pase eso”
El entrenador del combinado Sub-23 se lamentó por lo ocurrido y se refirió en particular a la expulsión de Enzo Millot por iniciar la gresca generalizada. “Al final, con lo que pasó, no estoy de acuerdo. Un jugador mío recibió una tarjeta roja y eso no lo acepto, no debe pasar. No queríamos que pase eso, pero no pudimos controlarlo. Fui a darle la mano a Mascherano y, al darme vuelta, pasó lo que pasó”, explicó, en diálogo con TyC Sports.
A su vez, el campeón del mundo en la Copa del Mundo disputada en el país galo en 1998 desestimó la idea de que esta era una revancha por lo acontecido en Qatar 2022 y no logró evitar volver a mostrar decepcionado por la actitud de sus dirigidos tras el pitazo final. “No quiero entrar en este debate. Hemos visto un partido de cuartos, de verdad. Fue muy difícil, pero hemos ganado. Igual, no me gustó lo que pasó con mis jugadores“.