Existen las casualidades o todo tiene su causa y efecto? La historia de Fernando Rapallini con Boca y con River, por ejemplo, tiene algunos datos muy curiosos. Si uno analiza el historial del juez, que debutó en Primera en 2015, con ambos clubes, verá una diferencia notable. A River lo dirigió 37 veces, en las que el Millonario logró 25 triunfos y 9 empates, y sólo cayó 3 veces. Si miramos su récord con Boca, encontramos que lo arbitró bastante menos (29 veces) y lo que llama realmente la atención es que de esos partidos Boca apenas ganó 10, empató 9 y perdió 10. Raro… Sobre todo porque desde que el juez dirige a la máxima categoría de nuestro fútbol, Boca ganó 7 torneos largos (5 ligas más una Copa de la Liga y la Copa Maradona), mientras que en ese mismo lapso River ganó ¡uno solo! Ah, en los últimos nueve partidos que Rapallini lo dirigió, Boca no ganó: fueron 5 empates y cuatro derrotas. Curiosidades estadísticas…
¿Quiere decir esto que Rapallini favorece a River y perjudica a Boca? Bueno, si nos atenemos a algunos de los últimos partidos, encontramos que no fue feliz su actuación en los Boca-Racing: no usó el mismo criterio en la última jugada del Racing-Boca con la mano súper evidente de Jonathan Gómez que con la de Sández en la final de Abu Dhabi que terminó dándole el título a Racing.
Mientras que hace apenas unas horas, en las polémicas del partido frente a Argentinos, el equipo de Demichelis se vio favorecido por decisiones cuanto menos discutibles (el penal a Enzo Pérez y el gol anulado al Bicho al final). Aunque el mismo Rapallini también perjudicó el año pasado a River, al no darle un penal frente a Independiente.
Pero lo más extraño de todo es que, si vemos los récords de otros árbitros que empezaron a dirigir más o menos por la misma época, los números cambian sustancialmente y se acercan más a aquella realidad de un Boca casi hegemónico a nivel local. Darío Herrera, que arrancó en el 2013, dirigió a Boca 33 veces con un récord 18 victorias de Boca, 10 igualdades y 5 caídas. Con River, sus números (sobre 23 partidos) son 12-4-7. Veamos qué sucede con Facundo Tello Figueroa: tiene 18-6-4 con Boca y 10-5-5 con River. Mientras que con Patricio Loustau, que lleva más años (desde 2009), y que atravesó buenas y malas épocas de ambos, el historial marca 21-13-14 con Boca y 24-9-9 con River. En todos los casos, hay un diferencial a favor de Boca y de River. El único caso en contrario es el de Rapallini con Boca en una época muy fructífera del Xeneize. Por eso llama la atención. Es extraño, curioso.
La bronca de Boca con Rapallini viene desde hace tiempo, un partido contra Huracán en el Ducó, en el 2018, cuando Gago lo acusó de “boludearlos” y faltarles el respeto a sus compañeros, y hasta le avisó del tema a Guillermo BS, el técnico, que también se cruzó con el juez.
Un último dato, ya que en la nota se lo menciona a Racing como beneficiario de los mismos hechos que perjudican a Boca. Su récord con Rapallini es de 15-7-3 en 25 partidos. Debe ser otra de esas curiosidades estadísticas, ¿no?
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