Con una interna complicada en esta ciudad, impropio de un presidente del comité Provincia de la Provincia de Buenos Aires, el diputado provincial Maximiliano Abad comenzó a hacer ruido y en su cometido lo acompaña Vilma Baragiola. Abad prometió tenerla en cuenta en la confección de futuras listas, según confió a mdphoy una fuente irreprochable y altamente informada.
Baragiola se alista en el gabinete de Guillermo Montenegro y de ha dado el caso de vivir algunas dualidades en torno a su relación con el intendente del PRO. Es una relación que proviene del loteo político y por lo tanto no merecería más espacio. Pero abre otro interrogante juega Montenegro en la interna radical, como lo hizo en la de gastronómicos, del PJ y en el Colegio de Abogados.
No habla de política sino a través de sus operadores, se dedica a la gestión predica, aunque después de observarlo y escucharlo en el escenario de La Normandina, es difícil autenticarlo en especial en aquellos de los valores, la transparencia y la austeridad.
Y Maxi arranca, pero en la línea de partida no lo acompaña ni el nivel de conocimiento, ni la empatía ni la intención de voto, lo cual vuelve a la conocida gastada de Juntos Por el Cargo, la chanza que utilizan desde la política, quienes intentan minimizar a sus adversarios.
Por ahora Maxi va, aunque no descartan que algún ofrecimiento lo haga desistir, es una carta que debe jugar desde la conducción partidaria nada menos que del principal bastión electoral de la República Argentina. Habrá que estar expectantes para ver cómo se dirime el elenco de las candidaturas teniendo en cuenta que Montenegro sostiene que “Mi único socio es Abad” a quien lo quiera escuchar.