Montenegro es de los que le mienten al médico. “Gordo hay que rescatar los valores, como la austeridad y la transparencia con las cuentas en orden”. Mauricio Macri emitió la sugerencia en 2018, cuando “Yo venía para ser intendente”, dijo Montenegro, junto al ingeniero Mauricio Macri compartiendo el escenario en La Normandina el jueves último.
Horas después el ingeniero Mauricio Macri recurrió a su cuenta de twitter y felicitó al intendente municipal Guillermo Montenegro haciéndose eco de sus palabras en una fantástica devolución porque “su gestión es un ejemplo de este ‘Para qué’: bajo su liderazgo, Mar del Plata pasó de ser una ciudad que arrastraba años de desidia, desempleo y problemas, a una ciudad donde hoy hay orden, superávit, austeridad y respeto”.
El jueves el intendente había expresado que cerraba con superávit y con menos empleados municipales que cuando asumió. No hay registros ni del superávit ni del plantel básico de empleados municipales. El marco político partidario del acto daba para la euforia, pero no para el delirio del falso examen y autobombo que protagonizó, del cual va quedando expuesto a medida que transcurre su gestión .
Tampoco lo sucedido tiene relación con el exacto conocimiento que debería tener el ex presidente Macri sobre el manejo municipal, por ejemplo no es la misma información que circula entre los socios de la coalición y que los negocios políticos mantienen precisamente al margen de la austeridad, la transparencia y otros valores de los que alardeó Montenegro.
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