Un soldado del 11º Cuerpo del Ejército de Rusia identificado como Konstantin Solovyov llamó a su mamá a través de un teléfono para contarle todo lo que estaba viviendo en territorio ucraniano. El oficial mencionó que “le gustaba” torturar y asesinar a los civiles ucranianos.
El crudo relato lo divulgó la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, tras interceptar la estremecedora comunicación. Tatiana Solovyova es la madre rusa que escuchó con atención la forma en que su hijo confirmaba que ni siquiera sentí remordimiento al cometer los actos antes mencionados.
En la grabación, se escucha mencionar dos formas a través de las cuáles los soldados rusos torturan a los civiles ucranianos. El método de las “21 rosas” hace referencia al castigo que implica quitar la piel de los falanges de la mano y los pies, además del pene en el caso de los hombres como si fueran pétalos de una flor.
En ese sentido, el soldado continuó con su explícita narración: “Así es como torturan nuestros muchachos del FSB. Hay un método de tortura más… Olvidé cómo se llama… ‘barril’, creo. Insertan un tubo en el ano y le ponen alambre de púas”.
Para el soldado ruso la venganza se paga con aún más venganza y así se lo comunicó a su madre: “¿Sabes cómo los ucranianos torturan a nuestros muchachos? Por eso no tengo ni una pizca de arrepentimiento”.
En otro momento de la conversación la mamá ve con buenos ojos las actuaciones desagradables que comete en su paso por Ucrania. “Entiendo que aquí me estoy volviendo loco, para mí es normal decir esas cosas”, mencionó Solovyov. Sin embargo, la mujer le responde con seguridad: “No, no te estás volviendo loco, estás bien”.
Dentro de la actualidad de la guerra entre Rusia y Ucrania, el ejército que responde a Vladímir Putin bombardeó Odessa y causó un gran daño a dicha ciudad, en la que se encontraba el presidente del Consejo Europeo.