Rusia no da el brazo a torcer y como consecuencia Ucrania sigue siendo atacada y afectada en todo sentido. Mientras se busca llegar a un acuerdo de paz, el país liderado por Vladimir Putin invade las ciudades más importantes, sin importarle la vida de los ciudadanos.
Durante este miércoles, el Ministerio de Defensa de Reina Unido confirmó el uso de bombas de vacío o termobáricas. Estas son armas devastadoras que, sin lugar a duda, provocan grandes explosiones y son capaces de evaporar cuerpos humanos, por lo que fueron prohibidas por el derecho internacional.
Es necesario remarcar que el uso de estos explosivos, fue denunciado por diversas organizaciones defensoras de los derechos humanos. Además de ello, las bombas termobáricas son un arma capaz de absorber el oxígeno del aire circundante para generar una explosión de alta temperatura. Por otra parte, las mismas consisten en un contenedor de combustible con dos cargas explosivas separadas que pueden lanzarse como un cohete o como una bomba desde un avión.
Recordemos que hace tan solo unas horas, se conoció la noticia de un fatal ataque a una maternidad y hospital infantil en Mariúpol. La noticia no tardó en llegar a los medios de todo el mundo y como resultado se informó que al menos 17 personas resultaron heridas, algunas de ellas trabajadores del hospital. No se reportaron niños afectados por el incidente.
Asimismo, Ucrania ha pedido a sus aliados de occidente aviones de combate para contrarrestar la superioridad aérea de Rusia. Fue así como el presidente Volodymyr Zelensky, declaró en el Parlamento de Reino Unido: “Hace ya trece días que escuchamos promesas; trece días nos llevan diciendo que nos ayudarán en el aire, que habrá aviones”.
Sin embargo, necesitan determinados aviones como el MiG-29 y solo unos pocos países los tienen. Finalmente, Polonia se ofreció, a desplegar su flota completa en la base aérea de Ramstein, en Alemania, y ponerla a disposición de Estados Unidos para que este país se los entregue a Ucrania. Lamentablemente, no se cree que esto sea una buena idea, ya que la iniciativa polaca plantea serias preocupaciones para toda la alianza de la OTAN.
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