La FIFA y la UEFA se sumaron ayer a la ola de sanciones contra Rusia por la invasión a Ucrania y anunciaron que suspenderán la participación de la selección nacional y de todos sus clubes en las competencias que organizan “hasta nuevo aviso”.
De esta manera, y mientras la medida rija, la Federación Rusa de Fútbol no podrá disputar el encuentro contra Polonia previsto para el 24 de marzo por el repechaje al Mundial de Qatar, de manera que su participación en la Copa del Mundo se encuentra en duda.
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“Estas decisiones fueron adoptadas hoy por el Consejo de la FIFA y por el Comité Ejecutivo de la UEFA, respectivamente, los máximos órganos de decisión de ambas instituciones”, agrega el comunicado difundido, a la vez que sostiene que “el fútbol está totalmente unido y en total solidaridad con las personas afectadas en Ucrania” y pide por una pronta solución “para que el fútbol pueda volver a ser un vector de unidad y paz entre las personas”.
Cabe señalar que el domingo la FIFA había anunciado una primera tanda de sanciones más leves contra Rusia que establecían que no podría usar su nombre oficial, sino que tendría que ser presentado como “Federación Rusa de Fútbol”. Tampoco podría usar su bandera y su himno no sonaría al comienzo de los partidos que disputara.
Por otra parte, y en sintonía con la FIFA y la UEFA, este lunes el Comité Olímpico Internacional solicitó que todos los atletas rusos y bielorrusos -país socio del régimen de Vladimir Putin– queden excluidos de todas las competencias.
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