La caída de una columna con linternas de semáforos, unos 100 kilos aproximadamente, caída al vacío sobre la Avenida Independencia (la de mayor circulación de la ciudad) no arrojó ni daños ni víctimas personales, la fortuna jugó a favor, una vez más. Cómo también se electrocutó un perro en una columna de la costa podría haber sido una persona, y lamentablemente, no hay que descartar que suceda en cualquier momento.
No es la primera vez que ocurre ni será la última, hay un ponderado de un caso por mes de esta naturaleza, incluidas las columnas de alumbrado y semáforos, con caídas de sus artefactos y lámparas. Y lejos de aplacarse, los casos irán en aumento.
En este contexto, hay un pacto en el cual el Sindicato de Trabajadores Municipales hace su parte. La misma consiste en acompañar en silencio, de cero compromisos de devolución con las obligaciones laborales que son retribuidas salarialmente.
Han cerrado el ajuste como moneda de cambio y lo deben absorber los empleados municipales. El resultado se observa en la calle. EL STM que conoce como nadie el déficit que existe en la vía pública ha decidido acompañar esta política.
Mientras el intendente Guillermo Montenegro gasta horas en protocolos frívolos, alarma una falta de calidad e intensidad de gestión que demanda otra dinámica, actitud y aptitud para administrar una ciudad cuyos problemas se lo van devorando.
El intento de gestión mediante inteligencia artificial y su amplificación, no es el camino, puede ser un método, como desaparecer cuando existen problemas de resoluciones serias, donde hay que poner algo más que imágenes de twitter o comunicados oficiales que inundan las redes sociales.
Mientras tanto los vecinos deben transitar entre todos estos trastornos, que están bajando dramáticamente la calidad de vida de los marplatenses y pésima atención a los turistas.
El intendente basó su campaña electoral, intentando convencer a la ciudadanía de su condición de marplatense, una credencial relativamente importante, pero su atributo fue construir la caricatura de su adversidad al kirchnerismo.
Por otra parte, es difícil imaginar pero cuenta a su favor con una oposición que no da la talla, en un espacio dispuesto a disputar el poder el año próximo. Oficialistas y opositores apuestan a que continúe la grieta: el mejor negocio político.
Quizás su opacidad se deba a que en el ámbito doméstico, se deban hacer cargo de los divagues, desencuentros y enfrentamiento internos que bajan desde la conducción nacional, el Instituto Patria, Balcarce 50 y La Plata. Y no es fácil construir con cimientos movedizos, es imposible de compatibilizar, con atajadas en Mar de Ajó y con lisonjas a Rusia. Es irremontable.
Hay que admitir, que la tranquilidad es una oferta constante del kirchnerismo, propone una dosis de relajamiento, no hay nada ni nadie (por el momento) que amenace a Montenegro, que también construye su propio hábito fofo, una tendencia que se va propagando, derivada del abuso de las inconsistencias, que no sólo se observan en el caos que va envolviendo la ciudad.
El intendente está más metido en la rosca política bajando línea para hacer próspera la incursión de Larreta en la Provincia de Buenos Aires. Ahí tendría más problemas de los previstos en el territorio hostil para JxC, que se lleva el 40 % de los votos del total país.
En ese papel, la conquista de General Pueyrredon es determinante para lograr la presidencia de la Nación, un desvelo para el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Montenegro debe hacer bien los deberes en la Quinta Sección Electoral: ganarla no hay otra opción
En General Pueyrredon, el Frente de Todos amortiza errores que le propinan desde el acuerdo con el FMI, los acuerdos con Rusia y China, el vacunatorio vip, la inseguridad y un combate político interno que genera más desazón económica y social.
No es irse de Mar del Plata, estos temas están en la agenda local de manera excluyente. Hace un mes se anunció el camino de circunvalación, la pomposidad del título requiere de una planificación e inversión que en campaña a lo sumo puede convertirse sólo en más fotos. Encima este mes enredados en la interna partidaria que dejará heridos.
Son los mismos desencantados peronistas que buscarán engordar el PRO, como lo proclamaron los pares de Montenegro y los “Sin tierra” en Tío Curzio. Negocios políticos y de los otros, la caja de la política no debe descuidarse, es de inalterable vigencia copar el ámbito del presupuesto público a como dé lugar. Sin esa fuente de financiación todo se volvería imposible, no es gente que vive del trabajo sino de la política, es esencial comprenderlo.
Mientras tanto asistimos a un menú absolutamente impresentable y desconocido en la administración de todos los gobierno municipales de la historia: sobreprecios, ofertas cartelizadas, prórrogas sobre prórrogas, procesos de licitación encubiertos, declaraciones de emergencia y un intento de instrumentación de un convenio multimillonario en el cual la MGP es el socio minoritario. Peor no se consigue.
Jorge Elías Gómez