A las 12:30 de este jueves y a través de Space X, despegó de la Tierra el denominado picosatélite de 461 gramos de peso y que cabe en una mano, cuyo objetivo es dar conectividad de internet de las cosas a zonas rurales del país. El proyecto nació en la Escuela Técnica Nº5 de Mar del Plata.
Aplausos y gritos de “Argentina” se escucharon en la sede de la empresa Innova Space en Mar del Plata, desde donde el CEO y docente Alejandro Cordero siguió el histórico hecho junto a alumnos que participaron de la iniciativa y funcionarios.
“Es un sueño hecho realidad”, aseguró emocionado el profesor, quien destacó la importancia de “la sinergia entre lo privado y lo estatal”, a la vez que agradeció el acompañamiento y “la ayuda de esta Argentina que no nos abandona”.
A las 12:30 de este jueves y a través de Space X, la compañía fundada por Elon Musk, despegó de la Tierra el denominado picosatélite de 461 gramos de peso y que cabe en una mano, cuyo objetivo es dar conectividad de internet de las cosas a zonas rurales del país.
“El barrilete cósmico está por despegar diría Víctor Hugo (Morales)”, dijo Cordera minutos antes del despegue del picosatélite, que “es el primero de Latinoamérica en este tamaño y con estas características específicas”.
El recientemente lanzado, denominado San Martín, es el primero de la constelación “Libertadores de América”, que será sucedido por el picosatélite “Juana Azurduy”, adelantó el CEO.
“En dos años vamos a lanzar más satélites que toda Latinoamérica junta en toda su historia” expresó el profesor, que relató el lanzamiento mientras algunos estudiantes lo seguían de manera remota y aparecían en las pantallas de la sede de Innova Space.
De manera remota participó el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, mientras en Mar del Plata estuvieron la directora ejecutiva de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), Fernanda Raverta y el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, entre otros funcionarios.
Kulfas ponderó el “esfuerzo de la ciencia y educación para sacar el país adelante”, al encabezar el lanzamiento.
La subsecretaria de Economía del Conocimiento del Ministerio de Desarrollo Productivo, María Apólito, destacó que el MDQubeSAT1 San Martín -tal el nombre del picosatélite- “es el primero de Latinoamérica en este tamaño y con estas características específicas”, y ponderó el proyecto como un “modelo” tanto de colaboración público/privada como “de una alianza virtuosa entre la educación y el mundo productivo”.
Minisatélites
Los minisatélites representan la nueva generación, cuya principal ventaja es la reducción de costos de construcción y lanzamiento, y se designan así a todos los que pesan menos de 500 kilos. A su vez, hay distintas subcategorías y el término “picosatélite” está reservado para los que pesan entre 100 y 1.000 gramos.
Por otro lado, la internet de las cosas -que algunos identifican como la próxima revolución industrial- hace referencia a la interconexión digital de objetos cotidianos con internet y sin la intermediación de personas.
“Este tipo de servicio de conectividad va a ser un común denominador de muchos sectores económicos porque tener en línea todo lo que atañe a un sector productivo es lo que se viene”, dijo Apólito a Télam.
La funcionaria explicó que para monitorear permanentemente y de manera remota cuestiones como “tiempos de cosecha, sequía u otras variables meteorológicas”, por ejemplo, no basta con sensores en el terreno sino que “necesitás conectividad entre los equipos y las apps que utilizan los productores; y para eso se necesita el servicio de internet de las cosas” vía satelital donde no la hay.
EL PRESIDENTE PARTICIPARÁ DEL LANZAMIENTO DEL MINISATÉLITE ARGENTINO
Alberto Fernández participará este jueves al mediodía, de manera virtual, del lanzamiento que se realizará en Cabo Cañaveral del primer satélite miniatura de origen argentino, llamado “General San Martín”.
“La iniciativa plantea la fabricación de los satélites más pequeños que se hayan construido en Sudamérica, con el objetivo de crear una constelación de comunicación a Internet que brinde cobertura total en toda la región, y estimule el incremento en la producción agropecuaria en los diferentes países”, explicó en un comunicado la Casa Rosada.
Se detalló que “los satélites PocketQube tienen un peso de 1 kilogramo y medidas aproximadas de 50mm x 50mm x 150mm, y tienen entre otros objetivos potenciar la productividad del país, colaborar a la tecnificación de procesos, brindar información en línea y de forma remota sobre el estado de cultivos y ganado, y colaborar a reducir los costos en el lanzamiento de satélites”.
Para el desarrollo del picosatélite, que forma parte de un proyecto de la empresa marplatense InnovaSpace, “el Ministerio de Desarrollo Productivo destinó casi 50 millones de pesos, además de facilitar la generación de un nicho de negocio incipiente para el país”, añadió.
El proyecto fue diseñado “para que sea exportable y aportar al proceso de sustitución de importaciones de equipos y servicios”, y “al ser de menor porte que otros permite reducir los costos de desarrollo y lanzamiento de este tipo de aparatos”, detalló la Casa de Gobierno.
“Tenemos una muy buena cobertura de internet, pero nuestro país es super extenso, muy diverso, hay lugares donde las empresas proveedoras habituales no llegan porque son áreas de campo donde no hay usuarios, pero sí hay máquinas y sensores”, agregó esta magister en Ciencias Políticas y Gestión de la Ciencia y la Tecnología.
A su turno, Cordero recordó que “el 70% de nuestro país se encuentra sin ningún tipo de cobertura de comunicaciones”.
El empresario explicó que la nueva plataforma “revolucionará la tecnología satelital”, en términos de “tamaño, bajo costo de lanzamiento y prestaciones de servicios, con infinitas aplicaciones“; dado que si bien este proyecto está focalizado en la agricultura, también puede ser aplicado a actividades “marítimas, mineras, petroleras y gasíferas”.
“Los silobolsas, por ejemplo, tienen sensores para saber qué está pasando: si son vandalizados, si el grano está bien, cuándo lo tienen que sacar del saco…Pero ese sensor sin comunicación, no sirve”, dijo.
El lanzamiento desde cabo Cañaveral
El primer satélite de la constelación “Libertadores de América” fue lanzado a través de Space X, la compañía fundada por Elon Musk, y se pudo seguir en vivo con una transmisión especial para invitados.
El pico satélite MDQube-SAT1 de 10 x 10 x 5 centímetros orbitará en la LEO (Low Earth Orbit), una Órbita Polar a unos 400-500 kilómetros aproximadamente.
“Esta primera misión consiste en una prueba de concepto y validación de la plataforma, lo que nos permitirá avanzar y realizar mejoras en el diseño del próximo satélite, en el cual comenzamos a trabajar próximamente”, concluyó.
Camino al lanzamiento
El camino que conduce al lanzamiento, comenzó en 2019, desde en las aulas de la Escuela Técnica Nº5 de Mar del Plata, cuando el profesor de electrónica Alejandro Cordero les propuso a sus estudiantes diseñar un picosatélite.
Superada la incredulidad inicial pusieron manos a la obra, ganaron diferentes concursos y crearon la empresa emergente Innova Space, que obtuvo en 2019 una inversión inicial realizada por Neutrón, la aceleradora de proyectos con sede en Mar del Plata.
Al año siguiente accedió al financiamiento de un ANR (Aporte No Reembolsable) del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación por 15 millones de pesos en el marco del programa “Soluciona”, al que ahora se acaba de sumar una nueva inyección de fondos de 50 millones de pesos del programa “Potenciar Economía del Conocimiento”, una convocatoria que estuvo específicamente dirigida a la industria satelital y aeroespacial.
“El sector de la economía del conocimiento no es solo software como a veces se cree, sino que hay otras actividades que son sumamente importantes y tienen mucho potencial en Argentina: una de ellas es la industria satelital”, dijo a Télam Apólito.
La funcionaria explicó que el primer ANR sirvió “para que se termine de construir este picosatélite”, mientas que el más reciente contribuirá a la “la segunda generación de satélites que van a ser desarrollados todo este año para ir lanzando la constelación”.
Apólito puntualizó que entre ambos programas, el año pasado se otorgó financiación por casi 388 millones de pesos a “21 proyectos de este nivel”; y a pesar de que el resto “no tienen tanto difusión, porque no están en etapa de lanzamiento” o no tienen que ver con el desarrollo de un satélite completo, son igualmente importantes.
“Argentina es uno de los 10 países que maneja absolutamente casi toda la cadena de valor de la industria satelital que está cambiando el modelo de negocios, porque está virando hacia la constelación de satélites”, dijo.
Por otro lado, la funcionaria explicó que “el gran desafío de la industria satelital, ahora que manejamos muy buen la parte física de la construcción de satélites, es poner el foco en cómo usar esa información de manera estratégica tanto desde el Estado como del sector privado, para tomar decisiones en base a grandes volúmenes de información” que provienen de estos artefactos.