Bajo el lema “De vuelta a casa, sanos y salvos, todos los días” la empresa distribuidora de energía EDEA llevó a cabo la Primera Jornada de Seguridad en el Trabajo, una iniciativa en el sector eléctrico local anunciada como “sin precedentes” por la firma.
A excepción del personal de guardia, la actividad reunió durante un día completo de labor a la totalidad de sus jefes y operarios técnicos con el fin de afianzar conceptos y reflexionar en conjunto sobre los riesgos que conlleva su labor diaria y las medidas de precaución que se deben tener presentes en todo momento.
El encuentro tuvo lugar en el predio de capacitación ubicado en Vértiz y Carlos Gardel, donde cerca de 300 personas participaron de charlas y clases teórico-prácticas sobre trabajos en instalaciones de media y baja tensión, técnicas de reanimación cardiopulmonar y comportamiento frente al riesgo.
El gerente general, Lorenzo Siquier, tuvo a su cargo la apertura de la jornada destacando que “si bien es cierto que contamos con un sistema de gestión que incluye a la seguridad como uno de los pilares de la actividad que desarrollamos, creímos oportuno ir más allá y dedicarle a la seguridad una jornada a pleno, una jornada de capacitación y también de camaradería, donde además de reafirmar conceptos pudiéramos intercambiar experiencias y conversar sobre cuestiones que se presentan en el trabajo diario”.
“La idea -dijo- es ir un paso más allá de la capacitación regular y de los protocolos, generando un ámbito que nos ayude a seguir construyendo conciencia sobre los potenciales riesgos que debemos afrontar en la actividad que desarrollamos y de la necesidad de cuidarnos entre todos, todo el tiempo”.
Las clases de capacitación tuvieron lugar en seis carpas instaladas en el campo de entrenamiento de la empresa, donde de manera alternada los asistentes participaron de las diferentes charlas que tuvieron a la seguridad como tema central.
La realización de la jornada se complementa con otras acciones que se están llevando adelante con respecto a la seguridad en la vía pública. En tal sentido la compañía está efectuando un programa de mantenimiento preventivo de las instalaciones que integran la red, al tiempo que se han intensificado las inspecciones para detectar el robo de energía que, habitualmente, tiene lugar a través de conexiones irregulares que ponen en riesgo la vida de los transeúntes y de los propios autores del fraude eléctrico.