Por Cristian Ariel Mangini
Shrek para siempre (Shrek forever after / 2010 / Estados Unidos / 92 minutos)
Director: Mike Mitchell
Guión: Josh Klausner, Derren Lamke
Sala y horarios: Cinema Los Gallegos (-en 2D- todos los días: 14:50, 16:50, 18:50, 20:50 y 22:50. Viernes, sábado y domingo también: 12:50. Jueves, viernes y sábado también: 00:50) Cines del Paseo (-en 2D- todos los días: 15:25, 17:40, 19:40 y 21:40. Viernes, sábado y domingo también: 13:40. Jueves, viernes y sábado también: 00:00) Cine Ambassador (-en 3D, doblada al castellano- todos los días: 14:15, 16:15, 18:15, 20:15 (excepto jueves) y 22:15. Viernes, sábado y domingo también: 12:15; -en 3D, subtitulada- jueves, viernes y sábado: 00:15)
Shrek, bueno, creo que todos conocen a Shrek. Las primeras dos partes de Shrek constituyen lo que podría considerarse como dos de las películas animadas más interesantes del estudio Dreamworks. Particularmente, el caso de la primera, cuya recepción le dio a la animación digital un espacio para la comedia, fue determinante en los años venideros para definir a un espectador distinto al que los estudios venían concibiendo. A los niños se sumaron adultos en busca de un gag distinto, con referencias a múltiples películas, fenómenos mediáticos, cuestiones políticas e incluso sexo. Con sutileza se incluían algunos de esos temas en lo que no es más que un cuento moral con personajes sólidos y alguna que otra reflexión ingeniosa. Pero luego, con la tercera, aparecieron los problemas de los que podía ser susceptible esta saga: la maleabilidad de los personajes, los malos gags y un relato irregular que aparece sin dirección y hace, lógicamente, a la película más aburrida. Ahora, con la cuarta entrega se confirma lo que aparenta ser un final de la saga, y un cierre para uno de los personajes más carismáticos de la animación. En este caso la dirección corre a cargo de Mike Mitchell, un irregular realizador de comedias que ha comenzado a dar sus primeros pasos en la animación desde hace unos años. Por otro lado se encuentra uno de los guionistas de Shrek tercero, Josh Klausner, que no promete demasiado en su tarea de subir el nivel respecto de la última entrega. Pero para saber más en detalle, veamos de qué trata: “Shrek se ha vuelto un hombre de familia domesticado, y extraña los días en los que se sentía como un verdadero ogro. Engañado por el maquiavélico y astuto duende Rumpelstiltskin, se encuentra en una versión distorsionada de la realidad, en la cual los ogros son perseguidos, Rumplestiltskin es rey y él y Fiona nunca se conocieron. Shrek ha perdido a sus amigos más fieles como el Asno o El gato con Botas, que no le reconocen, y deberá volver a luchar por conseguir el amor de su amada, la princesa Fiona”. La premisa, en un principio resultaba interesante, la idea de que el mundo de Shrek haya sido modificado en su integridad, pero la explicación de su aburrimiento parece un poco forzada y previsible en toda su dimensión, desde el comienzo al final. Veamos en que termina.