La compañía de distribución de energía eléctrica, Edea, anunció que a partir de una serie de inspecciones pudieron comprobar irregularidades en los suministros de dos fruterías y verdulerías, una panadería, una despensa y una cervecería artesanal ubicadas en la zona sur de la ciudad.
Las acciones en las últimas jornadas estuvieron centradas desde Fortunato de la Plaza hasta Mario Bravo y desde Jacinto Peralta Ramos hasta la costa.
En todos los casos se confeccionaron las actas de infracción, se retiraron las conexiones detectadas procediéndose a la normalización del servicio, previo pago de la energía consumida en forma irregular y la aplicación de los cargos y denuncias penalizaciones correspondientes.
Una de las frutería y verdulería infraccionada está ubicada en Jacinto Peralta Ramos entre Nápoles y Puán, allí se pudo comprobar que el comercio, que no contaba con medidor, se proveía de energía a través de una conexión directa a la red.
El otro de los negocios de igual rubro, sito en Fortunato de la Plaza y Florencio Sánchez, presentaba un fraude de similares características, actuando de igual modo.
En el caso de la panadería, que funciona en Cerrito esquina Lebensohn, personal de Normalización de Pérdidas de EDEA llevó a cabo la desconexión de los cables que de manera ilegal permitían que el comercio, cuyo medidor había sido retirado, tomara electricidad de la red.
La misma metodología era implementada por los responsables de despensa sita en Cerrito entre Puán y Lebensohn, donde también actuaron operarios de EDEA para normalizar la situación.
El último de los comercios detectados con fraude eléctrico fue la fábrica de cerveza artesanal de Fortunato de la Plaza entre Juramento y Korn, que si bien contaba con un equipo de medición, no registraba la totalidad de la energía consumida, merced a una conexión directa trifásica desde donde se proveía la mayor parte de la electricidad utilizada por el comercio.
Las inspecciones de Edea se realizan con el fin de regularizar suministros que con distinta modalidad incurren en fraude eléctrico y que, en la mayoría de los casos, generan situaciones de peligro no solo para las personas que lo llevan a cabo sino también para ocasionales transeúntes.