El intendente Guillermo Montenegro estuvo presente en el anexo “Ceferino Namuncurá” de la Escuela Municipal de Formación Profesional N°5 “Don Bosco”, donde docentes y estudiantes hicieron entrega de 2000 juguetes de confección 100% artesanal que llegarán a cada uno de los alumnos que finalizan su formación en los 33 jardines municipales de Mar del Plata y Batán. Además, se decidió que se entregará otra tanda de juguetes para el Materno Infantil.
Este mismo grupo coordinó junto a varias instituciones del municipio la confección 10.000 unidades de ambos, barbijos, tapabocas, cofias, botas y camisolines para la Secretaría de Salud. Luego, decidieron realizar una primera entrega de juguetes en el barrio Las Heras para festejar el Día de las Infancias. Sin embargo, la iniciativa no se detuvo con esa acción e incluso fue por más: es así que tomó forma “Sonrisas en tiempo de pandemia”.
En cuanto al proceso de realización de los juguetes, Mirta Borlandelli, la docente municipal que lleva adelante el proyecto, explicó que, primero, se buscan las imágenes y se subliman, se corta la tela, se arman y por último, son rellenados. “El trabajo es hermoso y, como lo indica el nombre del proyecto, es para generar sonrisas. Lo único que necesitamos es que nuestros egresados puedan recibir este pequeño regalo”, manifestó la docente y remarcó: “Es un orgullo pertenecer a la Municipalidad, sentir el acompañamiento del secretario de Educación, Sebastián Puglisi, por el apoyo desde el primer momento”.
Al mismo tiempo, Borlandelli agregó que “muchas alumnas están trabajando y ayudándonos desde sus casas, ya que buscamos siempre respetar los protocolos que nos indica la Secretaría de Educación y nuestras escuelas”.
En la confección, trabajaron alumnas de la Escuela de Formación Profesional tanto de forma presencial en la institución educativa como o en sus casas. Susana, alumna formada en la Escuela de Formación Profesional y que trabaja haciendo costuras desde su casa, informó: “me encanta esto, toda la vida hice corte y confección. Me gusta mucho aprender. Queremos que los chicos se sientan contentos y que disfruten de los muñecos”.
Mientras que Adriana, otra alumna, expresó: “Estoy muy agradecida por este proyecto solidario que me ayudó a perfeccionarme y aprender a hacer cosas. Agradezco a Mirta, al director de la escuela y cada uno de mis compañeros”.