“Si el resto de la industria puede, la obra privada también”. Con esta frase, referentes de la Cámara de Desarrolladores Inmobiliarios de Mar del Plata se expresaron en redes sociales y exigen que el gobierno provincial autorice el regreso de la actividad, paralizada desde que la ciudad volvió a Fase 3 por el avance del Covid-19.
La entidad presentó un video, que cuenta con el apoyo conjunto de UOCRA, la Cámara de Desarrollares Inmobiliarios y el Centro de Construcciones y Anexos.
Hoy desde el sector de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) se manifestaron con una “huelga a la japonesa”, es decir que volvieron a trabajar y seguirán haciéndolo durante la próxima semana, aseguraron.
Según explicaron, no hay motivo para que la actividad se haya paralizado, ya que de los más de 5000 obreros de la construcción que hay en la ciudad, se detectaron menos de diez casos de coronavirus. Y ninguno se dio en los espacios de trabajo.
Además, detallaron que a diferencia de lo que sucede en el AMBA, los obreros de la ciudad utilizan muy poco el transporte público. Y destacaron que no hay motivo que la obra pública esté activa y la privada no.
Por su parte, desde el Colegio de Arquitectos se mostraron en contra de la medida adoptada desde la UOCRA y a través de un comunicado señalaron que si bien “los reclamos son justificados, no compartimos este accionar”.
El comunicado, firmado por el presidente de la entidad, Eduardo Agüero, y su secretario, Diego Domingorena, considera que “por las particularidades de nuestra industria, la responsabilidad que ha demostrado el sector en el cumplimiento de las medidas sanitarias y las características de nuestra ciudad estamos en condiciones de volver a trabajar”.
Pero señalaron que “al alterar el marco normativo vigente, existe la posibilidad de que las ART no cubran a sus asegurados” y si bien la responsabilidad profesional al respecto se reduce si se toman determinados recaudos, “lo cierto es que no se está exento de quedar involucrado, como así también los otros roles en los procesos constructivos, como los empresarios y en especial los propietarios”.
Además, se agregó que “existe un riesgo latente de infringir artículos del Código Penal al desobedecer normas adoptadas por los funcionarios respecto de la propagación de una pandemia, como así también sanciones administrativas por parte de las autoridades municipales”.