En el mismo momento en que el juez federal Roberto Falcone le leía la sentencia a dos policías por proteger a una banda de narcos, la casa del magistrado ubicada en la zona de Playa Chapadmalal era desvalijada.
El hecho llamó la atención de Falcone ya que se trata de una zona bastante tranquila en materia de inseguridad.
La esposa del juez tampoco estaba en el domicilio, por lo que gracias a ese dato se pudo determinar que el robo ocurrió entre las 10:30 y las 13:00.
Los delincuentes lograron ingresar a la vivienda rompiendo una puerta, desactivaron el sistema de alarma y se llevaron un televisor, una computadora y otros objetos de valor. Pero no causaron mayores destrozos.
Según se pudo saber a partir de las pericias, los delincuentes utilizaron guantes para no dejar huellas dactilares.