Con los 55 casos de anoche, la semana culmina en Mar del Plata con 385 personas contagiadas de coronavirus medida entre el sábado 8 y el viernes 14 de agosto. Dicha cifra representa un incremento exacto del 40 % respecto a los anteriores 7 días, entre el 1° y el 7 de agosto, donde se confirmaron 275 contagios.
Es decir que en los 15 días que va del mes hay 660 casos, apenas 113 menos que en lo que se registró durante todo julio, cuando hubo diversos brotes. Cabe decir también que la ocupación de camas UTI ha permanecido estable, alrededor de las 60 unidades, lo que puede ser leído como una gran noticia.
Dichas cifras muestran claramente la expansión del virus en Mar del Plata, análisis que se corrobora con el mapa de áreas programáticas en las que el Municipio divide al distrito de acuerdo a los Centros de Salud.
En comparación con el anterior, del 6 de agosto, se observa un crecimiento de dichas zonas con presencia de contagios: mientras que en el primero, había 27 de 31 áreas tomadas por el coronavirus, en el último, actualizado al 14 del corriente mes, ya hay 29, agregándose Parque Hermoso y Antártida, que no registraban casos y ahora tienen 6 y 3 respectivamente. Continúan sin casos Colonia Barragán y El Boquerón. IREMI pasó de 261 a 392 contagios y Centro de Salud n° 2, de 97 a 208.
Los más optimistas alegan que en la última semana, si bien se observó un 40 % de incremento de contagios respecto a la anterior, la curva se estabilizó.
Puede ser, en todo caso, se observará en los próximos días. pero hay que reconocer que el tema se ha visto relegado de la agenda pública, tanto la que marca la política como la de los grandes medios. Y no sólo en Mar del Plata.
Las encuestas nacionales muestran una creciente preocupación social, por la economía por sobre el miedo a contraer la nueva enfermedad. La brutal caída que se espera en el PBI del segundo semestre, cerca del 20%, explica aquel temor, con el consiguiente aumento de la desocupación –del 10 % al 15 %- y de la pobreza. En General Pueyrredón esta realidad impacta de lleno.
Pero no por ello habría que desatender el avance del coronavirus. Resulta más que claro y absolutamente necesario ir planificando la temporada. Aunque tenga otros potenciales no explotados, Mar del Plata depende sobremanera del turismo. Y los turistas tendrán que ingresar a la ciudad más temprano que tarde.
Y tanto éstos, como la comunidad local, deberán acostumbrarse a esta nueva realidad, hasta tanto no aparezca la vacuna. Inevitablemente los contagios aumentarán y habrá que ver cómo responde un sistema de salud, que siempre en época estival se ve bastante colapsado. Valga de ejemplo que las visitas a la guardia del Hospital Regional se triplican en verano con respecto al invierno. El futuro inmediato también preocupa.
Y el presente tampoco da respiro. A la alarmante situación económica de la ciudad, con gimnasios trabajando al 5%, la gastronomía en poco menos del 50%, y con una persistente caída en las ventas minoristas, se le agrega, como se viene señalando, una cuestionada respuesta del gobierno de Guillermo Montenegro frente al avance del virus.
A la falta de prevención cuando había pocos casos, la administración local se sigue negando a la aplicación del Plan Detectar y a convocar a un comité de expertos. No se trata de mostrar temor a retroceder absurdamente de fase, algo en el que ya ni la propia Provincia aplica con rigor, sino a ocuparse debidamente de la situación epidemiológica, a la par de pensar la economía.
Quizás, sólo se trate de no negar la enfermedad para poder aplicar el remedio adecuado. Se continúan arrojando cifras al aire con poco sustento en la realidad. De hecho, se multiplican las denuncias en las redes sociales que tanto la Municipalidad como el Gobierno provincial muestran cierta morosidad a la hora de realizar hisopados y catalogar a determinados casos como sospechosos ante llamados al 107, al 148 o al 120. Se sabe que los casos se pueden “gestionar”.
Pablo Portaluppi
Disculpen, pero el Diario La Capital dice de 586 casos activos desde anoche,sabado 15