Un grupo de concejales marplatenses de distintos partidos políticos promovieron un proyecto de ordenanza que busca reducir y luego eliminar el uso de las bombillas y los vasos plásticos en Mar del Plata, a causa del alto impacto ambiental que producen en la costa.
El proyecto fue promovido por Santiago Bonifatti (Sumar por Mar del Plata), Ariel Ciano (Frente Renovador), Natalia Vezzi (UCR), Ariel Martínez Bordaisco (UCR), Marcos Gutiérrez (Unidad Ciudadana) y Marcelo Carrara (Agrupación Atlántica).
Bonifatti consideró que es deber del Estado apoyar las iniciativas que aporten a la limpieza de las playas y las escolleras, así como también brindar campañas de difusión y concientización sobre la separación de residuos tanto en espacios públicos como en privados.
“Estamos seguros que es posible llevar adelante esta legislación, ya que ciudades vecinas como Pinamar y Villa Gesell han iniciado por medio de ordenanzas un camino para eliminar la utilización de sorbetes, vasos descartables y bolsas”, comentó. Además, resaltó la importancia de trabajar en conjunto con otras ciudades costeras de la provincia.
El pedido responde a un reclamo de los ambientalistas, quienes notaron que las bombillas plásticas son uno de los productos que más se encuentran en las playas. Por su tamaño y su tipo de material, son muy difíciles de reciclar, lo que empeora la problemática. Actualmente, son el cuarto desecho plástico más común en las costas y océanos, y pueden tardar entre 150 y 1.000 años en descomponerse.
“Si a los sorbetes les sumamos los vasos descartables y las bolsas de polipropileno aportamos a las 8.000.000 de toneladas de plástico por año que reciben nuestros océanos”, sentenció Bonifatti.
La ordenanza está pensada en dos etapas para generar el menor perjuicio posible a aquellos comerciantes que se hayan estoqueado en la compra bombillas y vasos plásticos. La primera sería la de reducción en las ventas y la segunda, después del verano, plantea la prohibición del uso total.
Manga de corruptos xk no legislan de verdad
Pero porque no se dejan de reventar los huevos con boludeses vagos de mierda ponganse a laburar.
TENGAN EN CUENTA QUE ESOS ARTÍCULOS NO LOS LLEVA LA GENTE A LA PLAYA SINO QUE SE LOS VENDEN LOS VENDEDORES AMBULANTES, ENTONCES HABRÍA QUE BUSCARTE UNA SOLUCIÓN A ELLOS !!! ES POSIBLE QUE SE PUEDA RESOLVER MODIFICANDO LOS ENVASES (UN TAPÓN REVERSIBLE CON UN PIQUITO PARA BEBER) NO SE CÓMO SE PODRÍA RESOLVER EL ENVASE, A MENOS QUE LA INDUSTRIA SE VUELQUE AL TIPO TETRABRICK..!
Mira lo que se esta difundiendo:
Lección de Ecología
En la fila del supermercado, el cajero le dice a una señora que debería traer su propia bolsa, ya que las bolsas de plástico no son buenas para el medio ambiente.
La señora pide disculpas y explica: “Es que no había esta moda verde en mis tiempos.”
El empleado le contestó: “Ese es ahora nuestro problema. Su generación no puso suficiente cuidado en conservar el medio ambiente.”
Tiene razón, le dice la señora: nuestra generación no tenía esa moda verde en esos tiempos:
– En aquel entonces, las botellas de leche, las botellas de gaseosa y las de cerveza se devolvían a la tienda.
– La tienda las enviaba de nuevo a la fábrica para ser lavadas y
esterilizadas antes de llenarlas de nuevo, de manera que se podían usar las mismas botellas una y otra vez.
Así, realmente las reciclaban.
– Subíamos las escaleras, porque no había escaleras mecánicas en cada comercio ni oficina.
– Íbamos andando a las tiendas en lugar de ir en coches de 150 cv cada vez que necesitábamos recorrer 200 metros.
– Por entonces, lavábamos los pañales de los bebés porque no los había desechables.
– Secábamos la ropa en tendederos, no en secadoras que funcionan con 220 voltios.
La energía solar y la eólica secaban verdaderamente nuestra ropa.
– Los chicos usaban la ropa de sus hermanos mayores, no siempre modelitos nuevos.
– Entonces teníamos una televisión, o radio, en casa, no un televisor en cada habitación.
Y la TV tenía una pantallita del tamaño de un pañuelo, no una pantalla del tamaño de una vetana.
– En la cocina, molíamos y batíamos a mano, porque no había máquinas eléctricas que lo hiciesen por nosotros.
– Cuando empaquetábamos algo frágil para enviarlo por correo, usábamos periódicos arrugados para protegerlo, no cartones preformados o bolitas de plástico.
– En esos tiempos no arrancábamos un motor y quemábamos gasolina sólo para cortar el césped. Usábamos una podadora que funcionaba a músculo.
– Hacíamos ejercicio trabajando, así que no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre cintas mecánicas que funcionan con electricidad.
– Bebíamos del grifo cuando teníamos sed, en lugar de usar vasitos o botellas de plástico cada vez que teníamos que tomar agua.
– Recargábamos las estilográficas con tinta, en lugar de comprar una nueva y cambiábamos las cuchillas de afeitar en vez de tirar a la basura toda la maquinilla sólo porque la hoja perdió su filo.
– En aquellos tiempos, la gente tomaba el tranvía o el autobús y los chicos iban en sus bicicletas a la escuela o andando, en lugar de usar a su mamá o papá como taxista las 24 horas.
– Teníamos un enchufe en cada habitación, no un regleta de enchufes para alimentar una docena de artefactos.
-Y no necesitábamos un aparato electrónico para recibir señales desde satélites situados a miles de kilómetros de distancia en el espacio para encontrar la pizzería más próxima.
– Así que me parece lógico que la actual generación se queje continuamente de lo irresponsables que éramos los ahora mayores por no tener esta maravillosa moda verde en nuestros tiempos.
No dejes de enviarle esto a los mayores de 50.
Que piense que ya está bien de recibir lecciones de ecología de cualquier canta-mañanas de hoy en día. Gracias
Maten las ratas que andan por el paseo marítimo consejalitos.. primero
Y las botellas ? Y el desecho de aguas servidas al mar?
Y la falta de mantenimiento y control…?