Aunque causan polémica entre quienes aseguran que son poco equilibradas, cada vez más eligen tener lejos el alimento balanceado. Dicen que así previenen enfermedades.
Aunque causan polémica entre quienes aseguran que son poco equilibradas, cada vez más eligen tener lejos el alimento balanceado. Dicen que así previenen enfermedades.
La tendencia la hizo conocida la actriz Eugenia Tobal, que subió un video a su cuenta de Instagram donde muestra cómo le prepara un alimento balanceado “saludable” a su perro Romeo, por un plan de alimentación que le aconsejó Teresa Hein, una médica veterinaria que está entre los pocos que practican la corriente antroposófica en la región (ver aparte).
Aunque Tobal recibió algunas críticas de los usuarios que le reprochaban que las verduras no le hacen bien a los perros y el poco balance en la variedad de alimentos para su mascota, ella hizo una declaración en la que dice que “cocinarle a su mascota es un acto de amor”, especificó cómo armó el plan con la veterinaria de su perro y aclaró que sí incluye, aunque en pocas cantidades, carne roja.
“Vi el video de Tobal y me pareció algo inspirador para seguir con mi perro, entonces empecé a hacerlo. Hace un mes que le cocino a Milo –un Weimaraner de un año– y el cambio que noto en su salud y sistema digestivo, sobre todo, es increíble”, le cuenta a PERFIL Mariana Saud sobre una alimentación que le prepara cada día e incluye batatas, calabaza, cebolla, carne picada y saboriza con condimentos. Saud dice que también consultó con la especialista Hein por recomendación de Tobal y decidió elaborar el balanceado natural “para estirarle la vida a Milo lo más que pueda”. “Si puedo hacer que viva dos años más, mejor. Me siento culpable de haberle dado alimento balanceado”, afirma.
Hace muchos años, Saud tenía un perro con su mamá y “ella le cortaba las zanahorias”, cuenta. “En su momento me reía, porque conmigo no era buena cocinera pero con el perro se esforzaba mucho, porque decía que era más saludable”, afirma la joven que es diseñadora de indumentaria.
En este sentido, la especialista Hein dice que “el alimento industrializado, que tiene restos de pollo y carne roja, está todo deshidratado y produce que los animales se enfermen tempranamente”. “Mi recurso para mejorar la salud es recomendarles nutrientes vivos y mejorar el metabolismo para estirar su vida”, cuenta Hein sobre un fenómeno que proviene de países europeos, como España y Francia, y que en el país está en aumento: con respecto al año pasado, el consultorio de Hein recibió un 75% más de consultas de personas que quieren darle una dieta saludable a sus mascotas.
Patricia Rosales le da a Jack, su perro adoptado, lo mismo que come su familia. “Le hago todo sin sal porque les hace mal al sistema renal”, afirma y también cuenta que por las mañanas le prepara el desayuno. “Antes de llevar a mis hijos a la escuela, le pongo en su tazón un poco de leche con galletitas de agua y, cuando termina de comer, le agrego una manzana”, cuenta Rosales.
Veterinaria antroposófica
“Hace 14 años que predico una alimentación natural para los animales porque hay una epidemia de enfermedades –esclerosis y cáncer, sobre todo– y mi objetivo es que vivan bien”, le cuenta a
PERFIL Teresa Hein, que se presenta como “la única veterinaria antroposófica” de Latinoamérica. “Esta especialidad es una medicina complementaria que equilibra al organismo con su naturaleza”, explica Hein, que cursó un posgrado de siete años en la Asociación de Médicos Antroposóficos de la Argentina.
La veterinaria dice que “la mitad de la salud es lo que se come”, por eso recomienda en sus consultas de dos horas, en Olivos, incluir “nutrientes vivos, como pollo, pescado, harinas, polenta y cereales”, además de frutas y verduras.
Fuente: Perfil