Junto a carteles pegados en las vidrieras que explicaban lo sucedido, los comerciantes pusieron a disposición el pan y las facturas del día, para que los vecinos pudieran llevárselos gratuitamente y evitar que se echaran a perder. “La AFIP está preocupada en pequeños comercios para castigarlos y forzar su cierre”, aseguraron.
“El 60 por ciento del pan que se produce en la ciudad es trucho y va en aumento. En invierno pagamos lo que se puede y lo que no se paga esperamos al verano para hacer una diferencia y ponernos al día con las deudas. Pero llegan estos genios y en vez de castigarte en meses de invierno te destruyen clausurándote en pleno enero”, decía una de las cartulinas.
“La temporada estival no es buena, el gobierno municipal y en este caso la AFIP deberían preocuparse en erradicar a los truchos para que trabajemos y poder pagar impuestos. No deberían tomar decisiones que perjudican y llevan al cierre de comercios”, rezaba otra.
Además, se refirieron al escándalo protagonizado por el ministro de Trabajo Jorge Triaca y se quejaron: “¿Evadimos? Sí, $ 1,89; ¿Triaca evadió? Mucho más; ¿Robamos? No; ¿Triaca le robó al sindicato? Sí; ¿Nos castigó la AFIP? Mucho. ¿Castigó a Triaca? Nada”.
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