Inspección General, clausuró hoy una panadería que no tenía la habilitación comercial concluida, entre otras faltas, y decomisó 1500 kilos de pan elaborado.
En este contexto, el subsecretario de Inspección General, Emilio Sucar Grau, precisó que “este jueves se llevó adelante un operativo muy importante en un negocio en la calle Fortunato de la Plaza al 7300 aproximadamente, donde constatamos que no tenía la habilitación comercial concluida y había 1500 kilos de pan aproximadamente que no requerían las condiciones de higiene y salubridad necesarias”.
A la vez, el funcionario municipal destacó que “faltaban elementos de seguridad y, entre otras cosas, no se cumplía con el código alimentario. Además, faltaban facturas para determinar la procedencia de la harina” y puntualizó que “además de los 1500 kilos de pan elaborados, se decomisaron 250 kilos de pan para elaborar y 550 bolsas de harina, que fueron a parar al predio de Disposición Final”.
Vale destacar que estas tareas de controles se realizan a través de una política municipal del intendente Arroyo: “Tanto él, como el secretario de gobierno, Alejandro Vicente, nos han pedido tener una ciudad en la que sepamos qué es lo que consumimos”.
“Tenemos que cuidar a nuestros ciudadanos para no sufrir consecuencias en la salud y que todos los comercios actúen bajo las mismas condiciones en el marco de la ley”, concluyó Sucar Grau.