Unión había llegado a Pergamino con la pesada mochila de tres derrotas consecutivas, que lo obligaron a prestar atención a la tabla general y, especialmente, a la zona del descenso. Y con el empate conseguido ante Juventud, cortó la mala racha y mantuvo a raya a un rival directo por la Permanencia. En un campo de juego impresentable, el 0 a 0 fue justo, a pesar de que los dos equipos tuvieron chances para desnivelar.
El elenco marplatense recuperó la solidez defensiva y mantuvo su valla invicta, algo que no es un dato menor puesto que es el equipo más goleado del Argentino A. En el primer tiempo contó con espacios para lastimar, pero le faltó la puntada final y no concretó. Y en la segunda etapa, luego de desperdiciar un par de situaciones, sufrió con algunos embates de un rival desordenado, aunque nunca fue superado en el desarrollo. La igualdad le permite mirar el futuro con una visión más optimista, aunque deberá ratificar la mejoría como local.
El pésimo estado de la cancha de Juventud atentó contra las posibilidades de ver un buen juego, a pesar de la presencia, en ambos bandos, de volantes con capacidad para manejar el balón. Por eso, desde el inicio, la intención del local fue atacar por los costados y terminar reiteradamente en centros. Tanto Alessandroni como Giamarchi, exhibieron una marcada intención de abrir la cancha para la subida de Fontana y Candia, los volantes externos de Juventud, que aprovechaban las espaldas de Agustín Pérez y Federico Moreira. Pero los constantes envíos aéreos de ambos, fueron neutralizados por una zaga central de Unión que no tuvo fisuras. Tanto Juan Di Bártolo como Ramiro Jorge, se encargaron de despejar todo, ante la carga de los delanteros Zaldúa, Mazza y Bulgarelli. Y Pablo Di Bártolo, ubicado como lateral por la derecha, se cerró en varias ocasiones y colaboró en esa misión.
Ante esa receta de los pergaminenses, Unión tuvo espacios y trató de explotar la velocidad de Alba y Collantes en el ataque. En algunas réplicas, ambos encontraron mal parada a la defensa local. Y en otras, tanto Moreira como Agustín Pérez también llegaron a posición de gol mediante algunas combinaciones. Sin embargo, el elenco marplatense no pudo concretar por impericia a la hora de definir.
La primera situación para Juventud llegó a los 16′, cuando Ramiro Jorge dejó corto un despeje y Mazza remató desviado. La respuesta del equipo de Zwicker no se hizo esperar: a los 20′, Pérez cabeceó exigido tras un centro de Alba pero complicó a Vellido, que debió sacarla con ayuda del travesaño.
El elenco marplatense terminó mejor en el primer tiempo. Creció la figura de Luengo en la recuperación y Moreira tomó mayor contacto con la pelota. A los 34′, Castagnino se la jugó en una acción individual, eludió a dos defensores pero no pudo con Vellido. Dos minutos después, Pérez construyó una pared con Alba y ensayó un disparo que se fue alto. Y sobre el final de la etapa, dos remates desde afuera (Pérez y Alba) volvieron a inquietar al elenco local. La cancha invitaba a probar desde media distancia, porque un mal pique podía desencadenar la apertura del marcador.
En el complemento, Juventud salió con una postura más agresiva, aunque no contó con la profundidad necesaria para inquietar demasiado a Unión. Sin embargo, en el comienzo, logró llevar el trámite al campo rival, con la pelota parada como aliada. De todos modos, la primera chance clara fue para el equipo marplatense. A los 6′, Agustín Pérez habilitó a Collantes, que llegó por el segundo palo y desperdició la oportunidad con un tiro alto, cuando estaba mano a mano con Vellido. El pique le jugó una mala pasada a Jesús.
A los 16′, Juventud también contó con una posibilidad inmejorable. Tras un tiro libre y una serie de rebotes en el área, Diego Aguilar le dio de media vuelta y de milagro no abrió el marcador. Se fue apenas arriba del travesaño. Dos minutos más tarde, tras una pelota recuperada por Castagnino (recibió una patada en la cara por disputar ese balón que le lastimó la nariz) una media vuelta de Collantes no terminó en gol porque se interpuso justo el cuerpo de Fernando Guidi.
Mientras atendían a Castagnino fuera de la cancha, Mazza se recostó por la izquierda de la defensa de Unión, recibió y obligó a una buena respuesta de Aldo Suárez.
En la última parte del partido, Unión no generó más chances de gol. Hubo un tiro libre de Moreira que tapó el arquero local y un disparo de Alioto que pasó cerca. Juventud, que fue con más empuje que fútbol, estuvo cerca de ganarlo en los 5 minutos finales. A los 40′, un tiro libre de Giamarchi se desvió en la barrera y tenía destino de gol, pero una extraordinaria reacción de Aldo Suárez impidió la conquista. Y a los 44′, el propio Giamarchi dejó mano a mano al ingresado Lisandro Zárate con Suárez, pero el delantero careció de puntería y su tiro se pegó en la parte externa de la red.
A pesar de haber sufrido sobre el final, Unión pudo cortar la racha de derrotas ante un rival que necesitaba el triunfo como el agua. De visitante, el elenco marplatense pudo respirar, rescató un punto e impidió que los pergaminenses se acerquen en la tabla general.
(Fuente: El Atlántico)