Una actuación sólida en su mejor partido en el campeonato, le dio a Alvarado el claro triunfo sobre Belgrano de Santa Rosa por 2 a 0 y lo dejó en puestos de clasificación en el arranque de la tercera rueda de la Zona C del Torneo Federal A. El equipo de Duilio Botella dominó ampliamente las acciones, tuvo una gran actuación colectiva con puntos altos y prácticamente no pasó sobresaltos en el fondo. La mejor manera de encarar la fecha libre del fin de semana.Desde el minuto uno al noventa, hubo un solo equipo en la cancha y fue Alvarado. Porque Belgrano vino a hacer su juego, dejar que corran los minutos con dos líneas de cuatro bien definidas y apostar a alguna contra aislada. Pero no le salió ni con el partido empatado ni cuando se encontró en desventaja. En ningún momento pudo inquietar a Rodrigo Barucco que tuvo la noche más tranquila del certamen y apenas un remate desde lejos de Claro, con el 0-2 a poco del final, fue todo lo que hizo la visita.
Del lado del local, el “torito” no logró encontrar a Ezequiel Ceballos en la función de enganche y lo mejor estuvo con las trepadas de Nahuel Santos en su rol de lateral. Y así pasó el tramo inicial, jugando en campo visitante pero sin profundidad, hasta que “trapito” decidió recostarse sobre la izquierda y ahí se convirtió en el jugador más desequilibrante. Ricardo Ramírez va a soñar con el “10” que se cansó de encararlo en el mano a mano, le salía para un lado, para el otro y terminaba lanzando para los hombres que esperaban adentro. En la primera, Alexis Blanco cabeceó apenas alto; en la siguiente, el que ganó fue Compagnucci por el segundo palo y Vistarop reaccionó de manera brillante con el pie cuando la pelota se metía contra el caño izquierdo; y en la última de la zaga, no se la dio a nadie, Ceballos enganchó para un lado y para otro, hasta que se animó al latigazo de derecha que fue directo al cuerrpo de De Olivera que llegó a cruzar.
Lo que había merecido en lo que iba del partido, Alvarado lo consiguió a los 39′. Esta vez no fue por un desborde, pero sí por un centro de Ceballos en una pelota parada, la peinó Gastón Martínez en el borde del área y le quedó a Alexis Blanco que la agarró como venía y metió el remate cruzado, inatajable, para ponerle justicia al resultado. De no ser por una soberbia respuesta de Vistarop a otra maniobra personal de “Trapito” y un remate seco al primer palo, el “torito” se pudo haber ido con una distancia mayor al descanso.
El “torito” merecía la ventaja pero le faltaba la puntada final y se le empezaba a ir la etapa, con Belgrano logrando su objetivo. Sin embargo, a Blanco se le abrió el arco el sábado y una más le iba a quedar después del cabezazo. De pelota parada, el “equipo” de Botella consiguió lo que había estado buscando durante 39′, Ceballos manejó un tiro libre en posición de ocho, Martínez peinó y le quedó servida al goleador que no dudó y, de primera, antes que pique, metió el derechazo cruzado, lejos de las posibilidades de Vistarop.
Lo que quería ver la gente era como salía el equipo al complemento, porque ante Tiro se puso en ventaja pero el segundo tiempo le costó. Esta vez, no le dio chances de nada a Belgrano. Más allá de que Zubeldía mandó a García Barros para que se junte con los hombres de punta, Damián Luengo se adueñó de la mitad de la cancha y capturó todo lo que pasaba por ese sector. Pereyra y Compagnucci continuaban mostrando un buen nivel y los de arriba estaban expectantes para cuando les quede alguna.
La primera del complemento la ideó Blanco y no la pudo concretar Ceballos. En la siguiente, invirtieron roles y el enlace asistió al “9” que no fue egoista y la bajó adentro para Pennisi que no alcanzó a conectar porque despejó Canteros. Alvarado tenía que meter el segundo para no padecer de gusto y lo hizo a los 17′. Un rechazo largo luego de una salida del fondo encontró mal parada a la defensa, lo aprovechó Blanco para agarrar la pelota, sortear a Vistarop y Ramírez lo derribó cuando la iba a empujar de zurda. Marconi no dudó, sancionó el penal y la figura de la noche, Ezequiel Ceballos, se hizo cargo con autoridad para cruzarla arriba, a la derecha del arquero que eligió el otro palo.
El 2 a 0, lejos de relajarlo, le dio más confianza al conjunto de Duilio Botella que siempre buscaba un pase más para encontrar al compañero mejor ubicado, no tenía apuro y era dueño absoluto de las acciones. Pudo llegar al tercero con un gran tiro libre de Pereyra que se metía contra el caño izquierdo de Vistarop que reaccionó de gran forma y con una buena maniobra individual de Hermida en el cierre, que cacheteó el arquero y sacó Micucci sobre la línea.
Todo positivo para Alvarado. Un muy buen nivel colectivo y muchos puntos altos desde lo individual, con los que jugaron con confianza y contagiando a los que les tocó entrar que también rindieron a la altura de lo esperado. Tercer triunfo consecutivo del “torito” que se metió en zona de clasificación, cambió la cara en dos semanas y mostró una versión que ilusiona a los hinchas, que se fueron contentos, cantando y festejando, sabiendo que se puede mirar con tranquilidad la fecha libre, porque ahora Alvarado depende pura y exclusivamente de Alvarado.
Foto: Florencia Arroyos
