Además de sus aristas polémicas el expediente sobre la venta de las calles públicas a un emprendedor hípico, devino en la piedra de la discordia que brindó el marco para el cortocircuito público protagonizado por los concejales José Cano y Mario Rodríguez. Poniendo de esta manera en evidencia, las entrelineas del trasfondo en el cual subyace la tensión interna generada alrededor del armado del futuro gabinete del “hombre del impermeable azul”.
“La cuestión de fondo es que tenemos las aguas bastante divididas con respecto a este expediente”, admitió durante el debate la presidente del bloque radical, Cristina Coria. Mientras que su par de Acción Marplatense, Claudia Rodríguez, deslizaba con sorna que “el expediente ha producido fracturas en algún bloque que han sido evidentes en esta sesión. Así que no vamos a ser impedimento para que esas dudas se pueden zanjar y si es necesario lo devolvemos a comisión”.
El hecho es que tanto Mario Rodríguez como Nicolás Maiorano, no sólo adelantaron su voto positivo, sino que se opondrían firmemente a que el expediente retornase a la Comisión de Hacienda, que fue la última en tratarlo como habían mocionado Cano, Cristina Coria y el kirchnerista Pablo Retamoza.
Leer: Sancionaron la polémica venta de calles para emprendimiento hípico
“Este expediente tiene que volver a Comisión porque estamos comprometiendo las actividades cuando sólo faltan 20 días para un cambio de gobierno”, sostuvo el futuro secretario de Hacienda. A renglón seguido afirmó que “es impropio. Primero y desde el punto de vista económico, es un disparate porque las calles no se pueden tasar al valor del precio de cualquier terreno de la zona sino que son únicas y exclusivas y eso tiene un valor. Y segundo, sí vamos a afectar fondos por una ordenanza tan simple yo voy a manifestar que eso no está hecho correctamente. Ya que no tenemos la autorización de Mayores Contribuyentes para afectar esos fondos. Por lo cual anticipo el voto negativo del bloque de Agrupación Atlántica”.
“No digas que es un disparate sin haber leído el expediente”, contestó rápidamente Rodríguez.
Cano, replicaría con la vehemencia con la cual había argüido su postura: “en cuanto a si leo o no leo los expedientes, me parece que es un rapto de enojo que no viene al caso porque yo reconocí que no lo había leído”.
El debate siguió su curso pasando el uso de la palabra a otros ediles mientras la tensión anegaba el recinto y en un momento dado el edil atlántico se levantó de su banca y se dirigió raudamente hacia la del radical para proseguir la discusión con las maneras verbales de una disputa callejera, que no pasaría a mayores aunque poco falto para ello.
Luego Rodríguez, pediría el uso de la palabra para plantear que “no hay que echar un manto de duda donde no hay, hicimos venir a los funcionarios a la Comisión, nos sacamos todas las dudas y avanzamos en algo que hoy vamos a votar y a mejorar. No hay misterios ni ninguna cosa escondida. Cuando el dinero ingrese al Municipio, y se destine a una sala de salud yo voy a estar enormemente gratificado de que podamos haberle mejorado la calidad de vida a los vecinos de esa zona”. Y dejaría como advertencia que “no quiero que cada cosa que votemos en el Concejo Deliberante de acá al 10 de diciembre lo tengamos que pasar por el tamiz de la cuestión político partidaria de sí le corresponde a esta gestión o a la que viene”.
Como corolario, después de la exacerbación, Cano reconocería que “hemos dado motivos para que se hagan comentarios sobre este tema”. Y en un intento para aquietar las aguas, aclaró que “yo no echo manto de duda alguna sobre las actitudes de los demás concejales”.
Round 1
Fight!!!
No llegamos al 10 y ¿YA hay rosca?
Marplatenses ” Welcome to the hell “