Finalmente la Sala VI de Casación, confirmó la condena a 14 años de prisión para el ex suboficial de la Armada, Marcelo Alberto Girat, por haber abusado desde los 13 años a su hija Rocío. Cabe destacar que el hombre se encontraba detenido desde el año pasado en la cárcel de Batán, esperando por la resolución.
Girat había sido condenado el año pasado mientras aguardaba el juicio en prisión domiciliaria, la cual le fue revocada y desde hace un año se encuentra preso en el penal de Batán.
El ex suboficial de la Armada, fue hallado penalmente responsable por “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo”, en el marco de la causa 5304 del Tribunal Oral en lo Criminal 3 del Departamento Judicial de nuestra ciudad y aquellos hechos tuvieron lugar en jurisdicción militar.
La joven Rocío, fue abusada por primera vez a los 13 años y los mismos se repitieron hasta que cumplió 17. Tras comentarle a su madre la situación de la que era víctima de manera recurrente, ambas radicaron la denuncia en 2011. Los abusos tuvieron lugar tanto en la casa donde vivía la familia como en su oficina de la base naval, donde Girat argumentaba que Rocío iba a hacer tareas de limpieza.
Rocío Girat junto al ministro de Defensa, Agustín Rossi. El funcionario aseguró en aquel encuentro: “aplicaremos severas sanciones sobre quienes pudieran haber encubierto este hecho”.
Consultada por la confirmación de la condena, Rocío señaló a Brisas que “un verdadero padre no te viola. Me dejó secuelas que voy a arrastrar toda mi vida, así que me alegra que pase a una cárcel común, porque hasta el momento se encontraba en Batan esperando la sentencia firme, estaba aislado, y con muy buenas comodidades, por lo que ahora este violador va a estar con el resto de delincuentes”.
Asimismo la joven sentenció que “al margen de la sentencia de esta persona, ahora queda pelear porque la investigación en la Base Naval que debería haber terminado hace tiempo también. Allí, había personas que miraban películas cuando a mí me estaban violando y ni siquiera hacían nada cuando escuchaban mis gritos. Nadie me quiere dar información de lo que están investigando y no estoy al tanto de nada. Sólo sé que ya concluyó y que tardó mucho tiempo más de lo que se esperaba. Yo entraba siendo menor en estado de embriaguez a la Base, a la una de la mañana, y me retiraban a las cuatro después de los abusos. Fue terrible lo que allí pasó y peor que nadie haya hecho nada”.
Acto seguido recordó que “hace tres días que estoy llamando al Ministerio de Defensa para hablar con las personas que se reunieron conmigo en su momento, como el ministro de Defensa Agustín Rossi, porque necesito saber que las otras personas que colaboraron con Marcelo Girat también van a ir presos. Desde la Municipalidad me apoyaron desde un principio y lo hicieron siempre. El resto, desde la Armada, hasta el Ministerio de Defensa, se borraron. Es más, en la foto en la que Agustín Rossi me abraza parece que es lo único que quería, una foto, porque después desapareció también”.
Por último, Girat aclaró que “la gente en la calle me apoyó mucho, entre otras cosas, porque saben que nunca quise ponerme en el papel de víctima, sino que salí desde un principio a contar lo que me había pasado con la intención de que la persona que me violó quede tras las rejas. Además, siempre fue importante para mí que en función de mi caso se tome el ejemplo para que no se repita nunca más. Es importantísimo que quien padece una situación similar la denuncie. Los que estemos cerca la vamos a acompañar”.
