Tal vez los grandes trucos de magia sorprendan, esos que convocan al asombro a partir de un gran diseño de producción que crea maquinarias infernales de las cuales el mago de turno escapa trabajosamente. Sin embargo, están esos otros trucos, más pequeños, que tienen que ver con la prestidigitación en los que la mano es más rápida que el ojo. Iñaki Zaballetta sabe de eso.
En Maravillarte, magia pero no truco, así se llama el espectáculo que protagoniza, se destacan los juegos clásicos de magia llevando el arte a su esencia más tradicional, logrando un espectáculo intimista y a la vez divertido. El debut será este sábado a las 21 en el Teatro del Centro Médico (San Luis 1978) pero luego se podrá ver de jueves a domingo.
Zaballetta, marplatense de nacimiento, desde hace casi diez años alterna su vida como mago entre Argentina y España, ha sido galardonado con diversos premios entre ellos el Premio mundial de cartomagia (FISM La Haya, 2003) y actualmente reside en Madrid, donde combina sus actuaciones con la labor de profesor en la Escuela de Magia.
El mago ha alcanzado un gran reconocimiento de parte del público y colegas en la madre patria. Nació en la ciudad en agosto de 1981 y empezó sus estudios de magia a los nueve años con el gran maestro Ricardo Martín: desde entonces, no ha parado hasta convertirse en un gran artista, que sabe combinar su práctica con el humor.
También, a partir de su fama, ha sido convocado por empresas como Philips, Alfa Romeo, Fiat, entre otras y por prestigiosas salas como el Paseo La Plaza (Buenos Aires), Gialino Music Theatre (Atenas) y en Madrid en el Teatro de Casa de Vacas, La cripta Mágica, Teatro Arenal y en la Red de teatros de Castilla y León.
Desde el sábado, entonces, podremos disfrutar de su espectáculo Maravillarte, magia pero no truco. Un mago talentoso y un marplatense que ha realizado conferencias y galas específicas para magos en Argentina, España, Colombia, Grecia, Finlandia, Suecia, Holanda y China.
