Impulsan a Mar del Plata como polo educativo, con eje en la educación como política de Estado. La iniciativa corresponde al concejal Maximiliano Abad y reúne a universidades y terciarios de la ciudad con organismos del gobierno, para realizar acciones conjuntas y convertir a Mar del Plata en un polo educativo regional.
¿Por qué la educación es una de sus preocupaciones en su labor en el Concejo Deliberante?
Yo creo que el estado de la educación es una de las peores defraudaciones al pueblo argentino, y lleva años. La desintegración del tejido social que vive hoy nuestro país ha comenzado con el deterioro del modelo educativo. Esto tiene repercusiones en todos los niveles: se traslada a las calles, a los comportamientos de las personas, a la corrupción política y social. Mire, en la actualidad, por ejemplo, menos del 50% de los estudiantes terminan la escuela secundaria. Argentina cayó seis puestos entre los países latinoamericanos en lo que se llaman las pruebas PISA. Está 59 en el ranking global, integrado por 65 países. Y nuestra ciudad no está exenta de ese panorama, tiene los mismos problemas que el resto de la Argentina, que no siempre son atendidos por la dirigencia política. Yo diría que en lo que respecta al futuro y a las posibilidades de desarrollo del país, la situación educativa es un escándalo.
¿En qué consiste el proyecto que usted impulsa para que Mar del Plata se constituya en un polo educativo?
Mar del Plata es una de las ciudades más importantes del país, que cuenta con una amplia oferta académica universitaria y terciaria de gran calidad. Tiene, además, la infraestructura de hospedaje y de actividades culturales como para atraer a los miles de jóvenes que cada año elijen una carrera para estudiar. Entonces, nuestra propuesta es reunir a los diferentes actores desde el cuerpo legislativo municipal para impulsar políticas conjuntas. El objetivo es consolidar los esfuerzos que por separado realizan las universidades, los terciarios, y algunos privados, como librerías, comercios, hospedajes estudiantiles, entre muchos otros. Creemos que desde el Concejo Deliberante podemos reunir a todos y funcionar como canalizadores de esas iniciativas ante los diferentes organismos municipales, provinciales y nacionales. La idea es poner a la política al servicio de conseguir condiciones para lograr que la ciudad sea un verdadero destino de interés para estudiantes de toda la región.
¿Qué avances ha tenido el proyecto?
Se constituyó una mesa de trabajo, integrada por representantes de todas las universidades y a la cual se ha invitado también a todos los terciarios de la ciudad. Así, hemos avanzado en propuestas conjuntas ante la Secretaría de Educación del Municipio para presentarle las necesidades de todo el sector, y ante el Presidente del Ente Municipal de Turismo, Pablo Fernández, con quien acordamos cuestiones de promoción de la oferta académica.
¿Por qué es importante para Mar del Plata un proyecto de estas características? ¿La ciudad no tiene otras prioridades?
Seguro que las tiene. Pero la cuestión es lo que entendemos por políticas de estado. Si estamos permanentemente gobernando sobre los emergentes, perdemos la perspectiva de futuro. Nuestra preocupación también tiene que ser sobre las generaciones que vienen, sobre la ciudad y el país que vivirán nuestros hijos. Si bien se mira muchos de los problemas que tiene Mar del Plata de alguna manera se relacionan con el déficit educativo. La falta de oportunidades de una educación de calidad e igualitaria es la génesis de muchos de nuestros problemas. Por eso, nuestra ciudad tiene que proponerse ser un faro de educación en la región; tiene que convertir a la educación en una política de estado.
¿Cuáles son las acciones concretas que se están gestando en la mesa de trabajo MDP Educativa?
Estamos cerrando acuerdos con el EMTUR para que sea el organismo que canalice la promoción de la oferta en la región y a nivel nacional e internacional. También se está trabajando en una exposición organizada por el Municipio y que reúna a todos los involucrados. Por otro lado, proponemos comenzar a trabajar en una tarjeta estudiantil, que sea la que le permita a quien elije Mar del Plata para estudiar acceder a beneficios, bibliotecas, librerías, hospedajes. Esto generará valor agregado para el estudiante y un impulso a la actividad económica de varios sectores: alquileres, comercios, hotelería, turismo, centros culturales, teatros, cines, paseos de compras. La idea es que la educación sea un motor de desarrollo integral. Por eso hemos reunido a los principales actores y seguiremos sumando voluntades. Es un proyecto a mediano y largo plazo que no tiene banderas políticas, sino que tiene que trascender a las personas que nos gobiernan: es un proyecto para Mar del Plata.