Intendentes del Gran Buenos Aires consideran que Scioli los abandonó. El poder territorial que han construido, se debilita con la nueva orfebrería electoral kirchnerista para que Cristina sea reelecta.
Acción Marplatense con su candidatura retendría hoy la Municipalidad. El oficialismo del FpV, por más colectoras que haya no le hace mella, ya que no crecen ni Cheppi ni Garciarena. Mientras Scioli sigue cosechando rechazos por lo intendentes que sienten que no han sido defendidos ante el avance de las listas de adhesión, que impulsaron desde la Casa Rosada.
Ante una suerte de desmadre de votos y de candidaturas como un menú a la carta, se ha colado ahora el intendente de Tigre Sergio Massa, con buena imagen y potable para peronistas e independientes. En este escenario Scioli, Sabatella, Massa (por lo menos) irían por el sillón de dardo Rocha, pero en un tránsito que se ha complicado para Scioli, que ve ante sus ojos, como las penurias comienzan a desgastarlo, tras una obediencia debida que puede llevarlo al perigeo de su vida política.
Hoy cualquiera sea ya el resultado el gobernador deberá entregar gran parte de su capital político, a pesar de contar entre el 38 / 45 %, no se cierran las filas para ayudarlo, sino por el contrario le pasan esmeril y puede convertirse en el objeto preciso de un voto castigo, por su falta de definición y porque evidentemente él deberá dividir por el voto que favorezca a CFK, siendo el que más aportes hizo a la causa. Pero no fijó las reglas del juego y se lo devoraron.
Aunque Pulti aparece como exento de complicaciones, por un aporte inconmensurable del Tesoro Nacional, las colectoras no lo moverían, por la fuerte aversión que existe hacia el FpV y el P.J. dentro del electorado marplatense. La variante Pulti ha funcionado en 2007 y 2009, pero hay una sombra que lo debe mantener muy vigilante.
Consiste es cómo se armará el arco opositor, y el arrastre que produzca posiblemente Ricardo Alfonsín con el conocido los 3 de la 3, cómo y quiénes acompañarán al radical, es la incógnita a develar en esta perinola que amenaza con no dejar de girar hasta que llegue el mismo 23 de octubre. Una polarización entre CFK y Alfonsín, podría llegar a ser el maná electoral para una oposición desdibujada, con tanto o más problemas que el propio oficialismo
El complicado, sinuoso y errático rumbo de las negociaciones, no asegura a nadie que tenga todo atado en General Pueyrredón. Esa luz que ilumina a Pulti, puede sufrir alguna baja de tensión y políticamente ese lugar puede convertirse en blanco de munición pesada.
No en vano se ha tomado en cuenta que la Municipalidad de General Pueyrredón, acumula deudas que pueden llegar a los $ 100.000.000.- a fin de año, una cuenta atrasada con la recolección de residuos y tropiezos políticos diversos, como en el caso de la inseguridad. En La Plata es un tema de todas las mesas políticas esta situación y ven complicada la intendencia de Mar del Plata.
El preciso informe del GEN sobre la situación económica financiera de la MGP, obró como una bomba, en todos los despachos legislativos, tanto oficialistas como opositores. Esos informes circulan por los despachos oficiales de La Plata, y son tomados en cuenta en función de la seriedad u capacidad profesional del contador José Cano, que conoce muy bien las oficinas del Ministerios de Economía y del Banco de la Provincia
No descartan que se eleve el nivel de turbulencias, que embarren los meses que restan. Se advierte de las movidas de piso en las intendencias de Ayacucho, Pinamar, Chascomús y Carlos Tejedor. “No sea que le dejen abierta otra llave exclusa como en la Plaza Mitre” dijo un ex legisladora nacional en el descanso de la escalera que conduce al HCD, dando a entender que los socios de Pulti son de armas llevar, electoralmente hablando, y en algunos casos no electoralmente hablando.
“El intendente de Tigre se muestra tranquilo y repite que todavía hay tiempo. “Llamá a Scioli y andá a cantar con los Pimpinella”, le respondió el ex jefe de Gabinete a uno de los intendentes que lo llamó para “hablar de política” en esta semana. “Dale, sabés que con Scioli no se puede hablar, necesito sentarme con vos”, le retrucó el jefe comunal”, dice Rosario Ayerdi en el bisemanario Perfil en su nota dedicada a reflejar el desdichado momento de Scioli, a 180 días del acto final.
Todo un cuadro de referencia, pintado dentro del mega marco electoral que comprende nada menos que el 37 % del electorado de todo el país.
Jorge Elías Gómez